César no permite que el Alavés levante la cabeza

El Zaragoza se pasó la primera mitad en actitud contemplativa, mientras el Alavés se daba a un emotivo ejercicio de agonía. Si hubiera que personalizar ese espacio del partido en dos nombres, serían Celades y Nené. El primero define el paso del equipo aragonés con su juego silencioso, de quieta y calmosa transmisión. Lo de Nené tuvo más historia y un impacto superior. Apareció en las entretelas del juego para generar problemas al Zaragoza. En el minuto 5 le hizo un nudo a Álvaro y puso en el pie de Carpintero un balón que éste convirtió en estruendosa volea al palo. Luego el brasileño lo intentó en todas las posiciones, pero en todas aparecía César. A los 34 años, César ha encontrado al Zaragoza y el Zaragoza ha encontrado a un extraordinario portero. El empate fue cosa suya: faltas, tiros cruzados, llegadas hasta su misma barba. Todo acabó en él. Una vez Nené le largó una falta en dirección a la escuadra y César la descolgó sin perder la vertical. Lo más tranquilo. Un duque.

El Alavés fue en ese tiempo mejor que el Zaragoza, que sólo asomó la cabeza de Óscar una vez, para rematar fuera. El equipo de Chuchi Cos puso decisión y fútbol. Si hoy no cuenta tres puntos más fue por César y, después, por Diego Milito y Ewerthon. Porque el argentino hizo gol a los nueve segundos del segundo tiempo. Nueve. Pero ojo, es que había puesto la pelota en juego el Alavés... lo que resulta prodigioso, según se mire. Diego agarró un balón extraviado por Juanito en territorio comanche, avanzó cuatro pasos mientras los demás miraban y, tocándola con la curva interior del pie, se la puso a Constanzo en el ángulo de los amores.

El tanto fue demasiado para el Alavés. Víctor apuntaló su medio campo con Zapater y el Zaragoza ejerció un control psicológico y efectivo. Nené seguía intentándolo, y César parando. Salió Bodipo, pero nada. Para despejar las dudas, en el 84' Ewerthon se inventó una pared en el área con Diego Milito, rodeó el cuerpo desparramado de Constanzo y cerró la tarde con el segundo. Ewerthon es como Alí: baila como una mariposa, pica como una abeja.

Cos "No fuimos inferiores a ellos"

"Estamos fastidiados porque perdimos y no fuimos inferiores al Zaragoza. En la primera parte ellos llegaron cuatro veces y dispararon por encima de la portería todas sus ocasiones. Constanzo no tuvo ni que tocar el balón. En la segunda tuvimos un error individual que nos costó un gol a los nueve segundos, pero luego tuvimos también nuestras opciones y no las supimos materializar. Creamos oportunidades pero luego no las metemos y eso nos cuesta los partidos. Hay que seguir trabajando en esta línea y rectificar los errores que estamos cometiendo".

Víctor Muñoz "Ahora podemos mirar ya arriba"

"Después del primer gol, en una jugada magnífica de Diego, se ha visto la diferencia que no hubo en el primer tiempo, porque nosotros estuvimos muy imprecisos y ellos tuvieron varias ocasiones. La sensación de peligro la dieron ellos. Es nuestra primera victoria fuera con dos goles de diferencia y la puerta a cero. Con este triunfo nos alejamos de la zona peligrosa, y nos abre la posibilidad de pensar en la parte alta. Hay que ratificarlo frente al Mallorca y entonces tendríamos la segunda vuelta para demostrar lo que somos. Pero antes tenemos la Copa".