El Milan, posible rival del Madrid

Liga de Campeones | Milan 3 - Schalke 2

El Milan, posible rival del Madrid

El Milan, posible rival del Madrid

REUTERS

Un espectacular gol de falta de Pirlo y dos de Kaká permitieron al Milan derrotar a un Schalke que nunca se rindió y ofreció una imagen más que digna en San Siro, que debió sufrir hasta el último segundo para ver ganar a su equipo.

El Milan mantiene intactas sus opciones en esta Liga de Campeones y lo ha hecho después de superar al Schalke en un partido de muchísima tensión, que mandaba al ganador a octavos de final como líder de grupo y al perdedor al destierro de la Copa de la UEFA. La actitud e intensidad fue similar en los dos conjuntos, pero, como siempre, a este nivel la diferencia la marca la calidad. Son las estrellas las que deciden los encuentros y entre Schalke y Milan no hay discusión en este aspecto.

Un gol de falta de Pirlo desde más de 30 metros y dos de Kaká, en los que hizo una demostración de potencia y precisión en el golpeo, acabaron con la resistencia de un más que digno Schalke, un conjunto interesante, sin demasiadas fisuras en la defensa, completo en el centro del campo, donde sobresale el mediocentro danés Poulsen, y peligroso en ataque, con Kuranyi como pieza más visible. Sin embargo, nada de todo ello le sirvió para llegar hasta octavos de final, donde sí estarán el Milan, posible rival del Real Madrid, y el PSV, que se podría cruzar con el Barcelona.

El Milan empezó la temporada con el objetivo de ganar la Liga de Campeones y olvidar la forma en que perdió la final la pasada temporada y, aunque con sufrimiento, mantiene intactas sus opciones de levantar el trofeo. Y lo hace porque defiende como un equipo italiano y sabe mover el balón y jugar al fútbol como el más exquisito de los conjuntos del continente.

Nesta, Stam y Maldini, que tuvo que retirarse lesionado, imponen su jerarquía y respeto en defensa, y sacan el oficio cuando tienen enfrente delanteros más jóvenes y rápidos, como los del Schalke. Pirlo, que no pudo descuidar su trabajo en defensa para controlar a Poulsen, tuvo tiempo para dirigir el tráfico con lucidez en el centro del campo y llevar el balón hasta Shevchenko y Kaká, los dos que de verdad marcan las diferencias. El primer gol de Kaká llegó después de una sensacional acción individual del ucraniano y con el segundo puso una distancia en el marcador insuperable para los alemanes.

Fue insuperable porque el Milan, que terminó encerrado en su campo ante el empuje del Schalke, mostró toda su fiabilidad defensiva en los últimos minutos.