La FIFA aplicará "mano dura para devolver al fútbol al camino del juego limpio", según anunció ayer su presidente, Joseph Blatter, quien dijo que con los incidentes acaecidos en Estambul "se ha pisoteado el fair play y se han puesto en riesgo los valores principales de este deporte". Blatter anticipó que Turquía recibirá un castigo severo, "incluso podría quedar excluida del Mundial de Suráfrica, en 2010". "Puedo asegurarles que actuaremos con dureza, y lo digo como presidente de la FIFA y no como ciudadano suizo".

La selección de Suiza, mientras, llegó ayer a Zúrich donde fue recibida por cientos de seguidores, algo hasta ahora desconocido e inusual en el país helvético. "Bienvenidos a la civilización", se podía leer en una de las pancartas de apoyo de los seguidores. El seleccionador suizo, Kuhn, se vio obligado a dedicarles unas palabras. Muy emocionado, aún en la terminal del aeropuerto, dijo que "no estamos en la selección por dinero, sino por todos vosotros. Vuestra ilusión es nuestro mejor salario".

Los periódicos suizos también se mostraron muy críticos con los sucesos de Turquía. "Estambul, un infierno. Lo sucedido es incalificable e inadmisible", decía La Tribune de Geneve.

Desde Turquía apenas llegan reacciones. El que sí habló fue Nihat, que lo hizo en San Sebastián. El jugador turco de la Real Sociedad afirmó que "si sancionan a Turquía, lo mismo deberían hacer con Suiza". "Las dos partes han hecho cosas malas. Fuímos provocados y respondimos a esa provocación. El castigo, si llega, debe ser en ambas direcciones", precisó el delantero de la Real.

Altintop, que sí jugó en el partido de Estambul, afirmó desde Alemania, donde juega para el Schalke 04, que "lo sucedido no tiene que ver nada con el deporte". "Puede haber un castigo, pero no me pasa por la cabeza que nos excluyan del Mundial 2010", señaló.

Pero Blatter ha lanzado esa amenaza, y parece dispuesto a llevarla a efecto. La FIFA ha montado una Comisión Disciplinaria de urgencia que aplicará las sanciones "antes del sorteo del Mundial", previsto para el 9 de diciembre.

Grichting acabó en el hospital

El peor parado en la pelea fue el suizo Grichting, que recibió una patada en el bajo vientre que le provocó una lesión el canal urinario del que tuvo que ser atendido en el hospital de Estambul del que fue dado de alta ayer. También fueron atendidos por diversos golpes Vogel, Huggel y Burgener, uno de los técnicos de la selección suiza.