Una Copa envenenada

Copa del Rey | Alicante - Zaragoza

Una Copa envenenada

Una Copa envenenada

alfonso reyes

Diego y Savio no serán titulares. El Alicante es un matagigantes.

Alicante (y el Alicante CF) es la primera parada del Real Zaragoza en esta Copa del Rey 2005-2006. ¿Qué versión encontraremos en el Rico Pérez? Quizá los últimos resquicios de esa noche en Montjuïc, o puede que la ridícula estampa del Nou Estadi de Tarragona tal día hará un año. Esa competición es tan "suya" que Álvaro y Milito fueron expulsado con el Nàstic, y hoy no jugarán frente al Alicante, un año después. Cosas. Pues por ahí debería empezar el análisis del choque.

Víctor, que no se sentará en el banquillo por sanción, asume el reto de la Copa con unos centrales de circunstancias, Capi y Zapater, ante las bajas de los sancionados y el drama de César Jiménez. Generelo acompañará a Movilla en la creación, Ewerthon y Cani compartirán titularidad con Sergio García, mientras que Diego Milito y Savio se quedarán en el banquillo por si hay que apagar algún fuego camino de la medianoche. No sería aconsejable recurrir a ellos, teniendo en cuenta la entidad del rival (11º en el Grupo 3 de la Segunda B) y palpando tres partidos de Liga en siete días a la vuelta de la esquina. Víctor sí que tira de César Sánchez, tocado en sus fibras, pero suficientemente recuperado como para pegarle cuatro gritos a los novatos Capi y Zapater, en ausencia de la pareja habitual.

Quitándonos de la cabeza todas las diferencias futbolísticas que separan al Zaragoza del Alicante, el trago de esta noche lleva mucho veneno. Y no sólo porque el Alicante tenga en su haber las eliminaciones de Espanyol y Valencia (2002), sino porque es el propio Zaragoza el que llega metido en líos con los árbitros, con los empates y hasta con su propia suerte.

Es un partido trampa. El equipo viaja por la mañana en chárter, comerá en un hotel y dormirá la siesta. El riesgo de torrija se eleva hasta el infinito. Insisto, a Valencia y Espanyol les pasó eso, en el mismo escenario, con similares protagonistas. Andaba por esos tiempos goleando el rápido Sendoa, que repite esta noche en la punta del ataque.

Temores al margen, este Alicante no está pasando por su mejor momento. Tiene un presupuesto de lujo (2,5 millones de euros) para subir a Segunda A, y por ahora sólo se asoma al balcón pero sin ni siquiera poder mirar. Sergio Pelegrín, uno de los Hijos de Flores que no cuajó en la Ciudad Deportiva, será su central titular: "Ellos nos tienen mucho respeto", dijo ayer.

El amigo de Ronaldo.

Cacá le pone la nota exótica al Alicante. Este brasileño es aquel amigo de Ronaldo al que el hijo de Juan José Hidalgo (Pepe Aviones) le encontró acomodo en el Salamanca, y luego en el Albacete. Ha acabado en el Alicante, así que no va siguiendo exactamente los pasos de su padre futbolístico. Cacá será, no obstante, el referente en ataque del equipo de Pepe Bordalás. Convendría pues encarrilar rápido esta tercera ronda de la Copa en un césped del Rico Pérez del que hablan pestes. Será por algo.