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Primera | Málaga

El Málaga mete otra vez en la nevera al luso Duda

Quiere obligarle a renovar su contrato y el zurdo se niega

<b>APARTADO. </b>Duda, en un entrenamiento.

La directiva malaguista decidió de manera unilateral a última hora de la tarde de ayer volver a dejar a Duda en la nevera mientras no firme su renovación. Es el enésimo capítulo del culebrón del verano en la casa blanquiazul. La postura de apartar al luso del equipo trastoca los planes del técnico, que pierde a su mejor baza. Ya pasó en la primera jornada de Liga. El Málaga visitó Balaídos sin poder contar con el interior zurdo después de que éste se negase a aceptar una oferta de la Real Sociedad que reportaría a la entidad tres millones de euros y también a sentarse a negociar un nuevo contrato (el suyo acaba en junio de 2006). Sin embargo, la cordura llegó a tiempo y el portugués volvió a estar a disposición de Tapia desde entonces.

Ambas partes se dieron un plazo aproximado de un mes para reflexionar. Terminado el plazo virtual, la situación ha vuelto a oscurecerse. El jugador está sensiblemente afectado. Tendrá que ver cómo sus compañeros se enfrentan al Atlético de Madrid sin contar con su ayuda. AS pudo hablar con Duda anoche cuando se encontraba en su domicilio: "Me esperaba algo así más o menos, pero ya está la cosa más tranquila. Lo único que me han dicho es que no voy a jugar. Esta semana hubo algunos contactos respecto a mi renovación. No vale la pena hablar ahora de este asunto. Lo que quiero es mantenerme al margen por respeto a mis compañeros de vestuario. Tienen que estar concentrados para ganar al Atlético de Madrid que es lo realmente importante".

La bomba saltó alrededor de las 20:00 horas. Casi media hora después de que Duda saliese de La Rosaleda como un tiro en su coche tras concluir el entrenamiento a puerta cerrada. Antonio Tapia daba la lista de convocados con sorpresa. El jugador número 18 era un interior zurdo, pero no el que se esperaba. El canterano Antonio Calderón ocupaba su lugar. Y Tapia, con cara de póker.

Un caso similar al de Iaquinta Vincenzo Laquinta, delantero del Udinese, ha sufrido un infierno parecido al de Duda, pero durante menos tiempo. Después de marcarle tres goles al Panathinaikos en la Champions League, el club que entrena Serse Cosmi lo dejó fuera de las convocatorias porque se negaba a renovar su contrato, que en este caso expiraba en 2007. Al final, ambas partes llegaron a un acuerdo y el jugador amplió su compromiso hasta 2009. Duda no lo ha hecho.