El Málaga se llevó los tres puntos de San Mamés en un partido que apenas dio nada de sí durante una hora y que se volvió loco al final, tramo del choque en el que llegaron los tres goles que determinaron el 1-2 definitivo.

Abrió el marcador Edgar en el minuto 84, después de que peinase al borde del área el "Chengue" Morales y aprovechándose de un mal despeje de Lacruz con la pierna izquierda.

Empató sobre el filo del tiempo reglamentario el propio Lacruz, remachando en la línea de gol un remate de cabeza de Llorente en jugada que inició Guerrero y continuó Expósito. Cerró el marcador, ya en la prolongación, Antonio Hidalgo con un buen disparo desde la frontal con el que acabó una contra blanquiazul.

Poco fútbol y escasas ocasiones ofreció la primera mitad. Empezaron a estropear el partido varias caídas de jugadores casi seguidas que provocaron que se parase el juego con demasiada frecuencia.

Tiko animó el partido

La segunda mitad llevaba los mismos derroteros que la primera hasta la salida al campo de Tiko, que sustituyó a Etxeberria y mandó a Yeste a la banda izquierda. La salida del navarro animó el juego y consiguió que el Athletic rematase a portería.

El partido había cambiado de registro y como consecuencia de ello llegaron los goles. Los dos primeros con claro protagonismo de Lacruz y el tercero aprovechando el Málaga que el Athletic estaba volcado buscando la remontada.