Eriksson es obligado a volver al 4-4-2 por los pesos pesados

Hay guerra en el cuartel general de la selección inglesa. Los jugadores lo niegan, el seleccionador, Sven-Göran Eriksson, también. Pero la Prensa insiste que en especial los centrocampistas se sienten totalmente perdidos en el nuevo sistema que el sueco empezó a utilizar en la decepcionante victoria ante Gales.

En ese 4-3-3, David Beckham ejerce de quarterback, lanzador de los ataques ingleses desde su posición retrasadísima. El madridista está entusiasmado, pero es el único. La Prensa cree el mal juego ante Gales desata otra crisis interna que la influencia del centrocampista inglés es excesiva y que se cambió el sistema en parte porque Michael Owen estaba suspendido, pero también para que el jugador del Madrid adquirierara un mayor protagonismo. Hoy vuelve Owen y todo apunta a quese volverá al clásico 4-4-2.

Mientras tanto, Frank Lampard y Steven Gerrard, que se colocaron delante de Beckham,no pudieron desplegar sus velas ofensivas y fueron de los más anónimos en el partido del sábado,Gerrard tuvo que jugar en tres posiciones distintas. Eriksson reunió a ambos en privado para mostrarles su decepción con su comportamiento, pero los tres aprovecharon para sugerirle(la prensa inglesa habla de obligarle) a que cambie en el partido de hoy. Veremos qué sucede