Xisco es la apuesta de Caparrós en su estreno en Riazor

ACoruña se ha acostumbrado en los últimos años a convivir con el lujo de la Champions y la Intertoto parece un castigo, pero este año hay algo diferente: Caparrós. El Depor y su afición le estarán eternamente agradecidos a Irureta por llevar a un club modesto a la gloria, aunque eso sí, nadie podía negar que el entorno necesitaba un cambio. La tan manida 'rutina' tenía su parte de verdad y ahora, aunque hay pocas caras nuevas (De Guzmán) y no han llegado fichajes de renombre, el estado de optimismo se ha instalado en Riazor.

Luque, Andrade, Coloccini o Tristán serán algunas de las ausencias en el estreno del Depor en la Intertoto, una competición que sólo valdrá le pena jugar si acaba ganando (en Vigo aún se acuerdan de lo que en su momento se desprestigio la Intertoto desde A Coruña). La recompensa será la UEFA y recuperar algo del prestigio perdido. Riazor echará de menos a dos símbolos, Fran y Mauro, y tendrá la oportunidad de ver desde el inicio a Xisco, una de las pocas alegrías que han tenido en los últimos meses. Caparrós no se cansa de repetir que hay que darle la oportunidad de triunfar a un chaval de 18 años con ganas de comerse el mundo. Rubén parecía el destinado a ser el 'nueve', pero Xisco será hoy el elegido. Su cuento de hadas no tiene fin. El rival será el Buducnost, que llega como víctima pero que ha demostrado su pegada ante la Valletta.

Joaquí­n Caparrós "Nuestro problema es el nivel físico"

Es un equipo bastante ofensivo, joven, que combina bien el balón y que tiene velocidad. Aunque todo pasa por nosotros. Hay que respetar a los rivales, pero nosotros tenemos nuestra personalidad y filosofía. Nunca vamos a estar en función del rival. El nivel físico no es el adecuado. Ése puede ser nuestro problema, pero yo nunca me justifico por nada. Hay que tener amor propio y espíritu por competir".