Kameni sigue esperando una mejora de contrato

Hace meses y meses que se habla del futuro de Carlos Kameni. El pasado mes de octubre, desde Manchester, se conoció del interés que el United tenía por el internacional camerunés. El ojeador de porteros del equipo inglés, Tony Cotton, ha viajado en varias ocasiones a Montjuïc para seguir de cerca las evoluciones del internacional africano. Los informes son inmejorables, pero hasta el momento nadie de las oficinas de Old Trafford se ha puesto en contacto ni con el jugador ni con su entorno. Pese a todo, eso no quiere decir que otros clubes, entre los que está el Arsenal, también estén atentos a todo lo que suceda en las próximas semanas.

En cambio, desde las oficinas del Estadi Olímpic sí que tienen las claves para poner un final feliz a este culebrón que ya empieza a cargar en demasía. Hace meses, cuando Kameni comenzó a demostrar sus cualidades, se habló de una mejora de contrato, que por cierto, nunca ha llegado. Por ese motivo, el jugador tiene decidido cambiar de aires si finalmente no hacen un esfuerzo desde Montjuïc por tratar de retenerle.

Cierto es que el jugador se siente muy querido por los aficionados del club. Pese a que el día que Osasuna visitó el recinto olímpico (4-1) se oyeron gritos racistas desde varias zonas del estadio perico en su contra, Kameni lo tiene todo olvidado y sabe que aquello fue un pequeño incidente, triste, pero sin más.

La cláusula.

Cuando Kameni apareció por primera vez en la pretemporada de Peralada, lo hizo con cara de asustado. Todo el mundo sabía que era una apuesta personal de Tommy N'Kono. Una vez firmado el contrato, se conoció que podría quedar libre por seis millones de euros. Una cifra, visto, lo visto, que puede ser un caramelo muy dulce para los grandes y poderosos de Europa.