El proyecto de Benítez sigue firme en Europa

El proyecto Benítez se puso ayer otra medalla. La victoria ante el Bayer Leverkusen añade credibilidad a un equipo que sufría las bajas de Morientes, Xabi Alonso y Gerrard. Antes de llegar a Merseyside, uno esperaba encontrar cierto tono de decepción en los aficionados del Liverpool. Incluso Gerrard reconoció en la previa que éste no es el año en el que se van a ganar títulos. Pero en un Anfield lleno de nuevo se volvió a disfrutar de una noche europea con sabor a venganza: el Liverpool fue eliminado por los alemanes tres años atrás.

El equipo titular incluía a Luis García. Núñez empezó en el banquillo y Josemi, aunque recuperado de su lesión, no entró en la convocatoria. Las dudas no se habían despejado cuando el menudo extremo catalán, que trajo de cabeza a Placente, marcó tras un pase magistral de Igor Biscan.

El Leverkusen, desangelado hasta el último cuarto de hora, parecía haberse dejado en casa no sólo la equipación (tuvo que ser enviada la noche anterior desde Alemania), sino también las ganas. El Liverpool, consciente de sus limitaciones, se limitó a entregar la pelota a un rival que no encontró, ahogados por la presión, ni a Berbatov ni a Voronin, sus principales armas ofensivas. Tras un error defensivo, el primero debería haber empatado, pero lo que llegó antes fue el segundo tanto del Liverpool, una falta directa de Riise. En la variedad de jugadas a balón parado y en el orden defensivo sí se nota la mano del entrenador español. El tercero, un nuevo lanzamiento de falta, esta vez de Hamann, dejaba la eliminatoria casi sentenciada si Dudek no se hubiera dejado marcar un gol en el último suspiro del encuentro.

Rafa Benítez: "Antes hubiera firmado el 3-1, pero ha sido una pena"

Antes del partido hubiera firmado un 3-1, pero tal y como se ha desarrollado, al final ha sido una pena. Necesitamos estar concentrados hasta el final del partido. Dudek ha jugado bien y no estaríamos hablando de su error al final si hubiéramos aprovechado todas nuestras ocasiones. Este resultado ayudará a la confianza del equipo para la final de la Carling Cup, el domingo ante el Chelsea. Gerrard, que jugará el partido de vuelta, es clave para nosotros. Si está en el campo, el resto de los compañeros juegan mejor. Siempre soy positivo y pienso que podemos marcar en Leverkusen y complicarles la vida al Bayer Leverkusen".