"Es evidente que los árbitros tenemos fallos"

¿Tiene usted algo que comentar respecto a los tres penaltis que reclamó el Sevilla en el partido ante el Barcelona del sábado y que usted no sancionó?

Nada. Hay una normativa en vigor según la cual no podemos hacer declaraciones respecto a lo sucedido en un partido dirigido por nosotros. Los árbitros no podemos saltarnos una regla existente y yo, desde luego, no lo voy a hacer.

¿Esa normativa que impide a los árbitros realizar comentarios tiene fecha de caducidad. Hasta cuándo no puede hablar usted de lo sucedido en este encuentro?

En realidad, no existe ningún límite temporal en este asunto. La recomendación es que no hagamos declaraciones ni comentarios después de los partidos. Por otra parte, es evidente que la frontera la marca la misma actualidad. Es decir, es posible que las próximas jornadas pueda producirse alguna acción polémica más y que ya nadie pregunte por lo sucedido en el estadio Sánchez Pizjuán. Y como yo de eso no voy a decirle nada, si quiere puedo comentarle con mucho gusto otro tipo de cuestiones.

Dígame usted, ¿por ejemplo, de qué?

Pues que, como árbitro, sé que no sólo yo, sino todo nuestro colectivo, queremos hacerlo siempre lo mejor posible en todos los partidos. Los árbitros somos los que más interés tenemos en que nuestra labor sea la mejor, porque somos los primeros beneficiados si así ocurre y también los más perjudicados en caso caso de que suceda lo contrario.

Pero hay muchos errores.

Sí, pero que nadie dude de nuestra honestidad. Que hay errores; eso es evidente. Somos humanos y podemos fallar. Pero lo que debe quedar bien claro es que no son intencionados en ningún caso. Además, los árbitros no sólo tenemos fallos, también acertamos.

¿Y eso aplicado al Sevilla-Barcelona del sábado pasado, en qué se traduce?

En nada, porque eso sería hablar del encuentro del Sánchez pIzjuán y ya le he dicho que yo no me voy a saltar una normativa que está en vigor. Le hablaba de una manera genérica.