Ferguson ataca a Wenger: "Me da pena ese hombre"

Faltan dos semanas para que el Manchester United visite Highbury, pero las espadas ya están en alto. Alex Ferguson ha renovado su eterna antipatía por Arsene Wenger, al que ha acusado de querer enfrentarse a puñetazos con el preparador escocés en el túnel de vestuarios de Old Trafford el pasado octubre. "Me da pena este hombre", dice Fergie. En plena batalla verbal entre jugadores y entrenadores tras el tenso partido de Liga, Wenger "se dirigió hacia mí con el puño en alto y diciendo: '¿Qué quieres que hagamos?'. Me imagino que no pedirá perdón, es ese tipo de persona".

Wenger, quizá a sabiendas de que el conflicto suena ya a viejo, se ha desmarcado: "No voy a contestar más a ninguna provocación de ese hombre", dijo el pasado domingo. Pero ayer no se pudo contener y pidió que castigaran a Ferguson por calentar el encuentro. "El entrenador del Manchester hace siempre lo que quiere, dice lo que quiere", añade Wenger. "No tengo relaciones diplomáticas con él. Los entrenadores tenemos la obligación de respetar el partido en los días previos. Hay demasiada gente que calienta los encuentros y no se hace nada al respecto", en clara alusión al entrenador escocés.

El sindicato de entrenadores ha intentado calmar la situación entre los dos gigantes del fútbol y ha llegado a sugerir que igual sería necesario castigar a ambos por el cruce de declaraciones. "Está bien dejarse llevar por las emociones, pero creo que esta vez nos hemos pasado", dice John Barnwell, secretario del sindicato. "Aquí no tenemos un palo para darles unos cachetes, pero si la federación inglesa considera necesario actuar, yo les doy permiso".

"La diferencia de opiniones es saludable", continúa Barnwell, "pero con Sir Alex Ferguson y Arsene wenger el conflicto se está alargando demasiado. Hablan del pasado, de cosas que ocurrieron hace ya algún tiempo; son heridas que deberían haberse cerrado de una vez por todas".

Por su parte, Mourinho, que calificó a los jugadores del Manchester como "tramposos", podría ser multado. El portugués ha pedido que se trate a Alex Ferguson, que según Mourinho habla en exceso con los árbitros sin ser castigado, del mismo modo que a cualquier entrenador. Wenger cree que deberían castigar a Mourinho con al menos 64.000 euros (42.000 más que lo que el francés tuvo que pagar por calificar del mismo modo a Ruud van Nistelrooy). Más madera...