Eurocopa | Portugal 2 - Inglaterra 2
El luso no acabó y el inglés erró de nuevo
Figo protagonizó su mejor acción en el minuto 75, con un disparo que James despejó a córner cuando el balón buscaba la cepa del poste. Segundos después, dispuesto a sacar de esquina, Scolari decidía sustituirlo por Helder Postiga. Luis abandonó el campo por detrás de la portería y se fue directo al vestuario, para qué quedarse en el banquillo. Lo de Scolari era una traición al fútbol, pero a un fútbol caprichoso que quiso que, ocho minutos después, fuera Helder Postiga quien firmara el empate.
Figo era entonces el mejor de Portugal. Sin embargo, él y Beckham no brillaron. Cuesta ver a ambos desdibujados, ceñidos a los corsés tácticos de Scolari y Eriksson. El portugués ha perdido protagonismo con la irrupción de Deco, cuya presencia le obliga a buscarse los garbanzos lejos de su zona natural. Figo empezó en la izquierda, pasó luego a la derecha y acabó bajando hasta el medio campo para pescar la pelota, sin la que no sabe vivir. Lanzó dos faltas, pero en ambas el balón se fue alto.
Beckham tampoco lució en su suerte máxima, la que le hizo grande en el Manchester y ahora le es esquiva. En su único lanzamiento, estrelló el balón en la barrera. Para Figo, la guerra acabó en el minuto 75. Para Beckham no hubo respiro y murió saltando con Carvalho por todos los balones aéreos. Pero fue como si saltara hacia abajo. Al final perdió. Y lo que es más grave, lanzó el peor penalti en la historia de Inglaterra. Mandó el balón a las nubes y miró al empedrao. Pero no supo dónde meterse.
Sin fortuna.
Los capitanes no brillaron ayer en el estadio Da Luz. Figo se fue muy enfadado al ser sustituido antes siquiera de que se llegara a la prórroga. Mientras, Beckham fue de más a menos y sólo exihibió garra, muy poco para un crack mundial. Para más inri, erró garrafalmente en su penalti, echando por tierra las ilusiones inglesas.