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Eurocopa 2004 | Selección

Villar pidió a un policía que le apartara a un periodista

El presidente de la FEF se esconde para no aclarar el fracaso

TOMÁS GUASCH
El show del aeropuerto de Oporto, con la persecución periodística y la entrada en escena de la Policía tendrá continuidad este mediodía en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas con la comparecencia del seleccionador.
AGUILERA/SEVILLANO

La Eurocopa no sacó de penas a Villar. El presidente de la Federación añade el cataclismo deportivo a toda la serie de maldades que azotan su gestión durante los últimos tiempos. A tres o cuatro meses vista de la convocatoria de elecciones a la presidencia de la Federación, la cara de Villar es un poema. En condiciones normales, el seleccionador Sáez debería presentar hoy su renuncia. Pero se descarta que lo haga porque a su ex compañero en el Athletic sólo le faltaría acabar la temporada sin seleccionador absoluto en nómina. Sáez no le puede hacer eso a Villar.

Escondido entre las paredes del convento de Falperra y las de su hotel de la UEFA en Lisboa, Villar sólo abrió la boca en esta Eurocopa después del partido con Portugal para manifestar que Sáez continuaría y que el equipo no había tenido suerte. Cuando ayer fue requerido en el aeropuerto de Oporto por el micrófono de un periodista, Juan Antonio Alcalá, de la Cadena SER, le dio la espalda, salió huyendo y acabó pidiendo a un policía que le liberara de tan molesta persecución. Se trataba de conocer no sólo su opinión del día después, sino sus planes de futuro si acaba siendo imputado en el llamado ‘Caso Federación’ y, en defi nitiva, cuál es su estado de ánimo y sus planes en este delicado y tristísimo momento para el fútbol español que él dirige.

Sus personas más próximas hablan de un Villar del todo a la defensiva, que se siente perseguido y acosado por los medios de comunicación y por ciertas personas cercanas a la más altas instancias del deporte nacional, pero a la vez decidido a capear éste y todos los temporales convencido de que su trayectoria es irreprochable en Federación, UEFA y FIFA, y que, si acaso, sólo puede reprocharse no haber transmitido al exterior la bondad de su gestión. Villar también admite en privado que ciertas actitudes de algunos colaboradores (Padrón, Espino, Castillón y Borras del Barrio) han contribuido a enrarecer el ambiente en su contra.

Peleón. Uno de sus colaboradores más cercanos asegura: "No hay fajador como él. Otro hubiera abandonado". El presidente se siente ganador en las próximas elecciones si es que acaba presentándose, pues tiene la absoluta certeza de que el fútbol español, o por lo menos los que votan en la asamblea, les conocen perfectamente a él y a Gerardo González, su opositor. Y que entre los dos no hay color. Otra cosa sería si votaran los afi cionados de a pie. Todo el villarismo es consciente de que ese plebiscito lo tendría perdido.

El show del aeropuerto de Oporto, con la persecución periodística y la entrada en escena de la Policía tendrá continuidad este mediodía en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas con la comparecencia del seleccionador, Iñaki Sáez, en conferencia de prensa. No se espera que Villar le acompañe ante la nube de periodistas que querrán vivir lo que será la prórroga de la Eurocopa. La táctica del presidente de la Federación sigue siendo hablar exclusivamente a través de la página web y de la revista de la Federación que él dirige, convencido de que su mensaje no ha llegado nunca al gran público y que lo quiera o no él aparece como el gran culpable de todos los males.

CASILLAS: "ESTAMOS A MUERTE CON SÁEZ"

Iker Casillas, a su llegada a Barajas, respaldó la continuidad de Iñaki Sáez al frente de la Selección: "Estamos a muerte con Sáez y él con nosotros. Una persona que genera tan buen ambiente se merece un respeto. Villar ha dicho que el técnico continúa y el equipo lo agradece. Hemos perdido una buena oportunidad para hacer algo grande. Lo teníamos todo a favor. Hay que estar unidos".