Hubo cambio: entró Valerón y gol griego

Era Grecia. El Huevo lo tiene claro: a unos les da antes y a otros, un poco después. Pero las fases finales de Eurocopas y Mundiales suben el nivel del cagómetro de nuestros seleccionadores hasta hacerlos irreconocibles. Sólo se salvó Camacho, que en Holanda se cargó a Molina y en Corea pasó a la historia como el primer entrenador que dejó en el banquillo a Raúl porque estaba lesionado: casualmente. Todos los miedos y todas las dudas que Sáez dejó entrever en las delirantes vísperas del partido acabaron apareciendo: no se puede ser grande encarando los partidos de verdad como un pequeño. ¿Dará tiempo de aprender de aquí al domingo?

Torres, no. Volviendo a Camacho, aquí sólo acertó él. En la entrevista que publicamos ayer dijo: "Sáez no cambia lo que le va bien". Y no cambió. Perfecto. Jamás creímos que fuera a quitar a Morientes y poner a Torres; escrito está. ¿Pero a qué vino engañar a la prensa, jugadores y afición españoles hablando de cambios y rotaciones para acabar repitiendo equipo? Ayer lo único que cambió fue que entró Valerón y hubo gol: griego.

Ni tampoco Xabi. Inconcebible la no aparición de Xabi Alonso el día que más había que jugar rápido y mover la pelota. Empate malísimo y la sensación de ridículo que se nos queda. Escondimos la alineación para que no se enteraran Antonios, Georgios, Traianos, Theodoros, Stylianos, Angelos, Panagiotis, Zisis, Mihalis, Kostantinos, Themistoklis y Vasilios, que así se llaman los jugadores de Rehhagel. Una bandita ordenada, nada más. La cara desencajada del seleccionador fue definitiva: este 1-1 entra en la colección de nuestras más feroces cagadas.

Imponente. Total, que sólo ganamos en la grada. Fantástica nuestra gente otra vez. Ayer llegaron desde Ribadesella, Cieza, Oropesa, Burgos, Cáceres, Valladolid, Villena, Almería, la Peña Españolista de Montmeló, la Madridista 5 estrellas y unos tíos muy divertidos con una pancarta que decía: "Mamá, si gana España esta noche te hago abuela". Tranquila, mamá...

El Rey, mustio. Su Majestad coincidió en el palco del estadio Bessa con el ex nadador Josep Maria Pons, conocido como El Expreso de Reus, miembro de la alternativa disidente a la presidencia del Espanyol. Su Majestad dejó esta perla después del partido: "Confío en la clasificación". Pons se llevaría para Montjuïc a Seitaridis, Zagorakis y Charisteas: OK.

Florentino y Totti. Pese a que los blancos fueron los que acabaron contentos, el presidente del Madrid se fue tristón. No ganamos y se quedó sin ver a Xabi en un partido importante. La Real se ha plantado en 18 millones de euros como precio del joven Alonso. Pérez y Astiazarán hace días que no hablan; ya volverán. Eso sí: El Huevo puede afirmar y afirma que pese a que Camacho quiere terrestres, a Florentino el que le va es Totti. ¡Incluso más que Henry, fíjense lo que sabe El Huevo! Lo de Samuel, Carvalho, Luisao y demás es para disimular. Pérez sigue pensando que lo bueno está arriba.

¡Pobre limón! Segundo partido y el equipo y el limón parecen exprimidos. El ambiente que reina entre la expedición española es que el lunes estamos todos de vuelta a casa, en la playa el que la tenga a mano, tan ricamente. La única lectura positiva es que en Lisboa, el domingo, nos vale el empate. Pero los portugueses van a liar una que ríanse ustedes de aquella Revolución de los Claveles. Queremos creer que Iñaki Saéz tampoco dará el equipo, pero sí hará cambios. Hace eso o el grito de Delgado Meco será ¡equipo y un jamón!

Uefus horribilis. Para el Comité Técnico de la UEFA, el mejor jugador del encuentro de ayer fue Raúl: incluso él se sorprendió y así lo manifestó en conferencia de prensa. El Comité lo forman El Juli, Aíto García Reneses, Miguel Indurain y Benito Floro. ¡Qué barbaridad! Por cierto: Joaquín pasó el antidoping y le costó muchísimo. Normal: el partidito fue para mear y no echar gota.

El golpe. Y ya camino de la calle se oye por un altavoz: "Señor Francisco Franco, preséntese en la puerta de honor". El respingo fue general. Investigamos y sí: Francisco Franco estuvo en el partido. Es un señor de San Vicente de la Barquera.