Con esta apuesta por los técnicos de la casa, defendida por el director técnico de la entidad, Andoni Zubizarreta, que contaba con el aval del fallecido presidente Javier Uría, el Athletic retorna a una experiencia que no vivía, en sentido estricto, desde la temporada 1991-1992 cuando dio la batuta del primer equipo a Iñaki Sáez, que hasta ese momento solo había tenido esa responsabilidad para sustituir a entrenadores destituidos.

Con posterioridad, otros entrenadores de la casa, como Txutxi Aranguren o José María Amorrortu, también recibieron la misma encomienda, pero para sustituir a otro técnico mediada la temporada.

En la temporada 2000-2001 fue designado otro técnico formado en Lezama, como Txetxu Rojo, pero después de haber pasado por varios equipos de la liga española tras su primera etapa en el club bilbaíno.

La apuesta por Valverde supone, por lo tanto, la más firme por los técnicos de Lezama de los últimos diez años.

Ernesto Valverde, nacido hace 39 años en Viandar de la Vera, Cáceres, llegó a Lezama como jugador en la temporada 1990-1991 y permaneció en la primera plantilla del Athletic hasta 1996, año en el que fichó por el Mallorca, equipo en el que jugó una temporada -la del ascenso a Primera División- antes de retirarse como futbolista profesional.

Previamente a su llegada al club bilbaíno, había jugado en el Alavés, Sestao, Espanyol y Barcelona. En su periplo como futbolista, llegó a ser internacional absoluto y jugó 264 partidos, en los que logró 61 goles.

Recién concluida su carrera como futbolista, pasó a engrosar el cuerpo técnico de Lezama, en el que se inició como responsable técnico de uno de los equipos cadete (temporada 1997-1998).

Un año después, dirigió otro equipo cadete y al siguiente se hizo cargo del equipo juvenil de División de Honor.

Su primer asalto al primer equipo se produjo en la temporada 2000-2001, en la que ocupó el puesto de segundo entrenador a las órdenes de Txetxu Rojo.

En la temporada siguiente dejó temporalmente los banquillos para desempeñar el cargo de adjunto al director deportivo, Andoni Zubizarreta.

Tan solo estuvo una temporada en esa función ya que le esperaba el escalón previo al primer equipo: el filial Bilbao Athletic, al que ha entrenado esta temporada y al que clasificó para el play-off de ascenso a Segunda División.

Apenas una semana antes de que concluya la temporada con los "cachorros", Valverde acaba de recibir un encargo que supone su mayor reto hasta la fecha como entrenador: la responsabilidad de dirigir el Athletic después de efectuar un recorrido por casi todas las categorías de la entidad.