Primera | Real Madrid 2 - Sevilla 1
Morientes y el Madrid resucitan en el Bernabéu
Dos goles del "Moro" permiten respirar al Real Madrid, que terminó el partido sufriendo por un gol del sevillista Moisés.
El partido pudo haber comenzado como le gusta a la parroquia blanca. Morientes se plantó con el balón controlado en el área, la defensa le derribó, y el rechace le llegó a Figo, que marcó el primer gol a placer. El árbitro otorgó el 1-0, pero su asistente le instó a echarse atrás por fuera de juego del "Moro". No obstante, el revés no hizo cambiar su entrega a los madridistas, que se mostraron más combativos que de costumbre.
Con la presencia de Zidane, el Madrid parecía un conjunto distinto al de la semana pasada en Zaragoza. Dueño de la iniciativa y del ritmo del partido, el francés servía de embudo perfecto para repartir balones a Figo, Raúl y Morientes. En el primer tiempo, el Sevilla se preocupó sobre todo de solventar las acometidas rivales, y sólo inquietó a Casillas con un par de llegadas, obra de Javi Navarro y del joven Reyes.
Las oportunidades eran claras para los merengues, la más clara un cabezazo de Raúl al larguero, prólogo del 1-0 que marcó Fernando Morientes, gracias a un balón que tocó Zizou y que el delantero de Soseca enganchó con la zurda por debajo del cuerpo de Notario. El descanso sirvió para que el himno del Centenario resonara con fuerza en el estadio. Los aficionados estaban viendo una de las mejores versiones de su equipo esta temporada.
En la reanudación, la felicidad del Bernabéu pareció completa con el 2-0 también de Morientes, que a base de coraje convirtió en oro un balón suelto en la frontal del área hispalense. A partir de ahí, el Real Madrid vivió sus mejores momentos, vaselina de Raúl incluida. El choque parecía morir sin sentido, y Vicente del Bosque retiró a Morientes por Munitis en medio de la ovación de la grada.
Pero el Madrid de este año no sabe ganar sin un poco morbo. La ración del día la puso Moisés, que se anotó el 2-1 con un tiro raso al primer palo de Iker Casillas. El resultado no se alteró más, aunque quedó demostrado que la relajación es actualmente uno de los defectos más graves de los de Del Bosque. No es la primera vez, y quizá tampoco la última, que les sucede esta temporada.