Está imponente

Si el árbitro hubiera sido inteligente hubiera pitado el final, y todo el mundo guardaría en su memoria el control y la colocación con rosca del delantero atlético. Torres es un seguro para Luis y no es extraño que esté agobiado por su marcha al Mundial.

El cierre de la pretemporada rojiblanca fue una ratificación de lo que el equipo está apuntando. Buena seguridad defensiva y un ataque peligroso en función de la calidad de sus futbolistas. El Badajoz le cogió pronto el puntito, enviando a Leandro sobre Movilla para impedir el juego de toque que solicita y exige el técnico atlético. El empate de Txutxi, un zapatazo al lanzamiento de falta, fue una sorpresa que pocos esperaban. El Atlético en el primer tiempo impuso su manejo de balón, explotó por la banda izquierda y le faltó algo de control en la juego estático.

En el segundo período, con los cambios, el Atlético se soltó la melena y llegó un triunfo contundente. Y además acompañado por un excelente nivel de juego, como se mostró en el tanto de Stankovic, que fue una gran acción de contraataque. Movilla se adueñó de la zona central, con un Dani que enseñó que está con unas ganas tremendas y la defensa ni existió en este período. El partido se convirtió en un monólogo rojiblanco que se llevó el trofeo Ciudad de Badajoz y, lo que es más importante, dejó constancia de que este equipo está en el camino adecuado para dar muchas alegrías.

En el momento de las conclusiones parece que Luis ha conseguido dar su personalidad al equipo. En el partido ante el Badajoz hubo algo a reseñar. Parece que los atléticos van a ser un equipo de izquierda para el año que viene. La pareja Stankovic-Carreras funcionó mucho mejor que la formada por Aguilera-Armando. También existe cierta perdida de concentración en momento determinados y, a falta de una semana para el inicio de la competición, hay que alabar el tono físico, la mano del maestro Paredes se nota, ya que en las segundas partes los rojiblancos son auténticas apisonadoras. El Badajoz del primer período se mostró como el conjunto correoso que conoce la categoría y que será complicado superar, pero luego claudicó cuando se inició el carrusel de cambios.

El Atlético concluye invicto el verano y este es otro síntoma positivo. La moral de la plantilla es grande, se tiene fe en el sistema de su entrenador y los jugadores se están encontrando a gusto sobre el campo. En un partido de pruebas está claro que Luis tiene que estar contento, aunque el camino va a ser duro y complicado. Su primer gran objetivo, que es colocarse en los primeros puestos desde el inicio, parece garantizado. Los rojiblancos están que se salen y parece que quieren asustar desde el primer partido. Si a este buen bloque, unimos las tardes que pueden deparar tanto Fernando Torres como Stankovic, parece que por el Calderón este año se van a vivir muchos domingos de fiesta.