Más de 250 personas han muerto al hacerse un selfie, según un estudio

Desde que la palabra selfie fuera elegida vocablo del año en 2013 por el diccionario de Oxford todo el mundo está acostumbrado a tomar estas 'autofotos' como algo normal. Algo normal en el día a día que sin embargo puede entrañar su riesgo.

Un total de 259 personas han fallecido desde 2011 al tomarse una foto a sí mismos, según concluyen un estudio publicado en la revista Journal of Family Medicine and Primary Care y elaborado por un grupo de investigadores indios.

Los investigadores rastrearon las noticias relacionadas con muertes de este tipo en las noticias de todos los países, concluyendo que la mayoría de las muertes por selfies ocurrieron en la India, seguidas por Rusia, Estados Unidos y Pakistán. La mayoría de las víctimas fueron hombres (alrededor del 72%) y menores de 30 años, a pesar de la creencia de que son las mujeres las que se toman más fotos de este tipo.

Entre las causas de muerte, la mayoría son por ahogamiento tras caerse desde unas rocas cerca de una playa, seguida por lo que han denominado 'transporte' y que incluye por ejemplo personas que se tomaron fotos cerca de trenes en movimiento. A esto le siguen las caídas y después las muertes por armas de fuego en selfies donde se retrataba una persona con un arma, donde es Estados Unidos el país que más reporta. Otras 8 personas murieron al tomarse fotos con animales peligrosos.

La India es el país con más muertes 'por selfie', aunque los investigadores lo ligan con el número de población joven que reside en el país. Hay que tener en cuenta que desde 2011, cuando solo se reportaron 3 muertes de este tipo, la cifra ha ido en aumento, hasta significar 98 en 2017.

Los investigadores también apuntan que es difícil que el conteo sea total teniendo en cuenta que en países en vías de desarrollo muchas de estas muertes no llegan a la prensa, a lo que se suma que las muertes en carretera suelen reportarse como accidentes fatales, sin ser posible saber si el móvil ha influido.

Este es el primer estudio que trata de poner datos de forma real a estos casos. Ya sabes, más vale sacarse 100 selfies que uno inseguro.