Halloween

6 leyendas españolas que no tienen nada que envidiar a Halloween

Si estás cansado de Freddy Krueger, Jason y otros cuentos-pop de la fiesta norteamericana de la calabaza, aquí tienes algunos mitos patrios que puedes usar. Nominados al Oscar a mejor actor de reparto 2019

Tenemos que reconocerlo. Halloween nos ha vencido. Una de las fiestas yankees por antonomasia se ha colado en el imaginario de España y toda América Latina gracias a sus calabazas molonas y sus disfraces. Pero en España y la tradición latina también tenemos multitud de leyendas y mitos que podemos usar para celebrar nuestro miedo.

Es más, si la mayoría de los seres propios de Halloween proceden de la tradición de las películas slasher de los 80 (Jason, Freddy Krueger, La Matanza de Texas...) aunque con alguna herencia celta más antigua (Jack O' Lantern, el mito que dio origen a Halloween), en España tenemos mitos y leyendas que dan mucho miedito desde hace bastante más tiempo. Así que vamos a repasarlos un poco que si hay que pasar miedo, mejor hacerlo con algo de la tierra.

1. La Santa Compaña

La idea es básica en esta leyenda, una de las más populares en Galicia, Asturias o León. Vas por el monte dando un paseo durante la noche -que sí, ya te expones a una situación de riesgo- y aparecen un grupo de ánimas ataviadas con el mismo albornoz negro que la representación habitual de la muerte para avisarte de que tú o alguien cercano a ti va a morir pronto. Eso, si no mueres tú del susto claro.

2. El Sacamantecas

Seguro que de pequeño te han bromeado con el mito del Hombre del Saco o del Coco, un personaje que en cada país tiene un nombre distinto y que, en definitiva, es universal. Pues bien el Sacamantecas es como la versión gore del Coco, principalmente porque tiene la afición de raptar niños para sacarles la grasa del cuerpo y hacer con la grasa después de todo. El mito se originó en la Edad Media y se hizo popular de nuevo en el siglo XIX cuando a la grasa humana se asoció a la idea de tener factores rejuvenecedores. La cosa da especial mal rollo porque ha habido varios 'Sacamantecas' reales, entre ellos Manuel Blanco Romasanta, un tipo que se dedicaba a hacer jabón con la grasa de niños pequeños y que además aseguraba ser un hombre-lobo. Toma ya.

3. La Isla de San Borondón

Mira tú por donde en España, y más concreto en las Islas Canarias, tenemos una isla que aparece y desaparece cuando le da la gana. Se llama San Borondón, y hay avistamientos hasta 1953. Y sí, si sabes que hay una isla que aparece y desaparece solo puedes pensar que ahí hay cosas extrañas o que es la isla de Lost.

4. La Guajona

También llamada como Lumia, es una apacible anciana que habita en Cantabria y Asturias. Y eso, que solo es una abuelita. Ah bueno, también es famosa porque tiene un único diente que te clava cuando estás dormido y te deja sin sangre.

5. Basajaun

El Basajaun es un mito vasco que también existe en el Pirineo aragonés y que podría ser una versión propia del Yeti. Al parecer estos seres son hombres peludos muy grandes que viven en el bosque y que el ganado puede percibir. Se dice que son espíritus buenos, pero no faltan los relatos en los que digamos, se ponen agresivos.

6. El duende de Zaragoza

En 1934 la ciudad de Zaragoza fue presa de un caso especial que llegó incluso a diarios norteamericanos. En un edifcio céntrico, la criada de una familia comenzó a escuchar risas por la hornilla de la casa. Poco a poco todo fue a más, hasta el punto de que la policía mandó levantar parte del suelo en busca de algún conducto que llevara hasta donde alguien podría haber gastado la broma. Al final, el caso se judicializó y acabaron culpando de las voces a la propia criada. El problema, que se dice que el duende siguió allí unos días, hasta marcharse maldiciendo a todos.