Mientras el gobierno español presiona a las autonomías para que los burdeles cierren debido al incremento de contagios en las últimas semanas y la dificultad para rastrear positivos, Berlín ha dado un paso intermedio permitiendo la reapertura de los burdeles, pero sin permitir el sexo completo.

Estos locales llevaban cerrados desde que en marzo explotara la pandemia en todo el mundo y ahora está permitida la reapertura, pero sólo para masajes eróticos hasta que en septiembre se relajen las medidas, si el país mejora.

Esta medida no parece contentar a Jana, mujer de 49 años, que hablar para AFP. "Prefiero el servicio sexual, mis clientes también", expresa.

En Alemania es legal la prostitución y unas 40.000 profesionales tiene derecho a contratos laborales y prestaciones de seguridad social.

Las trabajadoras sexuales de Hamburgo exigen la reapertura de los burdeles

Sin embargo, en Hamburgo, unas 400 prostitutas, se han manifestado para exigir la reapertura de los burdeles después de meses cerrados. "La profesión más antigua necesita tu ayuda", se podía leer en algunos de los carteles de la manifestación.