SUCESOS

Caso Madeleine. La policía encuentra un sótano oculto en la casa del sospechoso

Varios vecinos de Brückner afirman que lo vieron por la zona durante años paseando a sus perros o haciendo barbacoas. Vivía en un remolque a cuatro kilómetros.

Según ha adelantado el diario Bild, la policía alemana ha encontrado un sótano escondido en el jardín de la casa donde vivía Christian Brückner, el principal sospechoso de la desaparición y asesinato de Madeleine McCann en 2007. La operación, en la que participa un gran equipo de policías, especialistas forenses y perros rastreadores, comenzó en las primeras horas del lunes y se espera que continúe al menos hasta el final de este miércoles. Se ha levantado una valla en el perímetro para impedir que los trabajadores sean observados por los muchos medios de comunicación que han acudido lugar.

En la actualidad, la parcela situada en las cercanías de Hannover se encuentra abandonada y llena de maleza, por lo que los agentes han tenido que usar dos pequeñas excavadoras, así como palas y rastrillos para despejar el suelo y abrirse paso. Las grandes losas de materiales de construcción también han sido eliminadas. Un antiguo amigo del sospechoso declaró el mes pasado que Brückner le había confesado la intención de crear un sótano en una de sus propiedades como el utilizado por Josef Fritzl, más conocido como 'El Monstruo de Amstetten'.

Según declararon los vecinos a medios locales, la parcela de Brückner tenía una cabaña que había sido abandonada y este pasaba por ahí para pasear a los perros o hacer barbacoas. Sin embargo, no vivía allí, ya que la residencia permanente en esas colonias no está permitida, aunque sí la construcción de estas cabañas para aperos y alguna pernoctación. El sospechoso de 43 años vivía en una casa remolque situada a cuatro kilómetros del lugar investigado. En aquella época vivía como mecánico. En 2008, los edificios de la parcela fueron derribados. Aunque no se sabe quién los derribó, según cuenta uno de los vecinos.

A punto de quedar libre

Hace pocos días, Christian Wolters, fiscal que lleva el caso, declaró que están convencidos de la culpabilidad de Brückner: “Esperamos encontrar pruebas forenses que lo demuestren”. La investigación se ha intensificado porque a finales de diciembre habrá cumplido su condena y quedará libre si no hay una acusación formal contra él.

Fue encarcelado en 2011 por tráfico de estupefacientes. También tiene pendiente una condena de violación en Portugal de una estadounidense de 72 años, aunque la sentencia está en suspenso porque el proceso está en revisión. Por último, fue acusado de pedofilia cuando encontraron un USB con fotografías de pornografía infantil debajo del cuerpo de uno de sus perros, enterrado cerca de la localidad de Braunschweig, a solo 60 kilómetros de Hannover.