El descubrimiento de la vacuna contra el coronavirus centra ahora la mayor parte de los esfuerzos de la comunidad médica y científica por todo el mundo. Pero no es el único objetivo, las perspectivas más optimistas hablan de que la vacuna podría estar lista para principios de 2021, como pronto; pero mucho antes podría llegar la cura de la COVID-19, un fármaco específico que combata la enfermedad derivada del SARS CoV-2.

Hasta ahora, los médicos de todo el globo han tenido que improvisar para medicar a los pacientes graves de la enfermedad: cloroquina e hidroxicloroquina, ambos medicamentos indicados para la prevención y el tratamiento de la malaria, en la primera fase; corticoides más adelante para evitar la acción inflamatoria en los pulmones que acaba derivando en neumonía grave. Pero una farmacéutica de Estados Unidos ha revelado que podría contar ya con un fármaco diseñado exclusivamente para contrarrestar la COVID-19.

Combinación EE UU-Canadá

La compañía Lilly, en colaboración con la biotecnológica canadiense AbCellera, comienza ahora los ensayos clínicos en humanos de un medicamento basado en el anticuerpo LY-CoV555, identificado a partir de las muestras de sangre de uno de los primero recuperados de Estados Unidos; espera resultados de esta fase 1 del ensayo para finales de junio, tras lo cual establecería una segunda fase más amplia para testar la eficacia del fármaco y sus posibles efectos adversos. 

El anticuerpo LY-CoV555

"Las terapias con anticuerpos como LY-CoV555 pueden tener potencial tanto para la prevención como para el tratamiento de la COVID-19 y pueden ser particularmente importantes para los grupos más afectados por la enfermedad, como los ancianos y las personas con sistemas inmunes comprometidos", ha indicado Daniel Skovronsky, presidente de Lilly Research Laboratories, que ya avanza los siguientes pasos: "A finales de este mes, revisaremos los resultados de este primer estudio en humanos e intentaremos iniciar ensayos de eficacia más amplios. Al mismo tiempo que estamos investigando la seguridad y la eficacia, también estamos comenzando la fabricación a gran escala de esta terapia potencial. Si LYCoV555 se convierte en parte de la solución a corto plazo para la COVID-19, queremos estar listos para ponerlo a disposición de los pacientes lo más rápido posible, con el objetivo de tener varios cientos de miles de dosis disponibles para fin de año".