NUTRICIÓN

Un alto consumo de alimentos ultraprocesados acorta los telómeros (y la vida)

Investigadores del CIBEROBN, adscritos a la Universidad de Navarra, han constatado en su último trabajo que un alto consumo de alimentos ultraprocesados acelera el envejecimiento celular al acortar los telómeros.

as.com

A estas alturas la mayoría de las personoas somos conscientes del papel determinante que juega la alimentación, junto a otros factores, en nuestra salud. Y de igual forma ya no existe ninguna duda razonable que justifique la inclusión de alimentos ultrarocesados en nuestra dieta ni su consumo habitual.

Los alimentos ultraprocesados son preparaciones industriales elaboradas a partir de sustancias derivadas de otros alimentos que incluyen largas listas de aditivos (conservantes, colorantes, edulcorantes o potenciadores del sabor), con muy poco valor nutricional, que tienen un contenido rico en grasas, azúcar o sal y aportan, como es obvio, una cantidad ingente de calorías.

El problema es que cada vez más ocupan un lugar preferencial en nuestra lista de la compra. Ya sea por su sabor, por cuestiones de tipo económico o como consecuencia de un estilo de vida que rara vez nos permite un respiro para enfrentarnos con calma a los cuatro fogones, lo cierto es que suponen una solución fácil. No exenta de consecuencias.

Y es que un nuevo trabajo a cargo de investigadores del CIBEROBN, adscritos a la Universidad de Navarra, han constatado en su último trabajo que un alto consumo de alimentos ultraprocesados acelera el envejecimiento celular al acortar los telómeros.

La investigación, dirigida por la catedrática Amelia Martí y publicada en la revista 'The American Journal Of Cinical Nutrition', se ha centrado en examinar la influencia de la dieta en la integridad del material genético o ADN, particularmente en los telómeros (marcadores de edad celular que reflejan el envejecimiento) que pueden acortarse bien por el envejecimiento propio de la edad o por otras causas como una alimentación inadecuada.

Y en este sentido, la conclusión a la que han llegado los expertos después de un seguimiento a un amplio grupo de participantes mayores de 55 años pertenencientes a la cohorte 'Seguimiento Universidad de Navarra' (SUN) es que, efectivamente, la dieta es fundamental. "Nuestros hallazgos demuestras la existencia de una asociación entre un alto consumo de alimentos ultraprocesados y el riesgo de poseer telómeros más cortos", explica por su parte Lucía Alonso, primera firmante del trabajo.

Años llenos de vida

"Lo más importante y novedoso fue que un alto consumo de esos alimentos ultraprocesados (más de tres raciones al día), deteriora los telómeros y acelera su acortamiento. Estos resultados confirman a nivel molecular los de grandes estudios previos realizados en España, Francia y EE.UU. que encontraron recientemente mayor mortalidad prematura asociada a un alto consumo de alimentos ultraprocesados", concluyen los investigadores para quienes el estudio de los telómeros en relación con el envejecimiento "no pretende la búsqueda de la inmortalidad, si no que busca prolongar aquello que tanto preocupa: una vida saludable que no solo llene de años la vida, sino que llene de vida los años".