Consejos para desinfectar el móvil: hay que hacerlo a diario

Sin duda, el teléfono móvil nos acompaña durante mucho tiempo al día. Por eso, para prevenir el contagio de la COVID-19, es necesario desinfectarlo cada día. Según algunos estudios, la pantalla del aparato puede acumular hasta 30 veces más bacterias que la taza de un váter, de ahí la importancia en mantenerlo limpio siempre.

Existen una serie de consejos para higienizarlo:

• Previamente a esta crisis sanitaria, la gran mayoría de fabricantes recomiendan desinfectar nuestro teléfono una vez al mes, algo que podríamos hacer con un paño humedecido con agua y alcohol. Hay que colocar primero el producto en el paño y luego frotarlo sobre la superficie, sin aplicarlo directamente. Se recomienda hacerlo con el dispositivo apagado y desenchufado y lavarse las manos tanto antes como después del proceso.
• Si lo vamos a limpiar en profundidad, un requisito imprescindible es quitarle la funda, que también habrá que desinfectar antes de volverla a colocar. Esto se debe a que también puede acumular suciedad y bacterias. Es esencial limpiar tanto la parte delantera como la trasera.
• A la hora de limpiar la pantalla, lo mejor es utilizar paños similares a los que se usan con los cristales de las gafas, puesto que poseen microfibras, aunque también se puede hacer con agua y alcohol.
• Si la pantalla está protegida por cristales templados y están deteriorados, o la pantalla está rota, las grietas pueden ser una fuente de contaminación. Por eso, si el cristal protector está roto, conviene quitarlo.
• Debido a que la pantalla es probablemente la parte más frágil del móvil, para no dañarla hay que evitar el uso de limpiacristales, amoniaco, disolventes y otro tipo de productos abrasivos.

Recomendado por Sanidad

El Ministerio de Sanidad ha publicado una guía explicando las medidas de precaución para prevenir el contagio y la expansión del coronavirus. Entre ellas, se recomienda desinfectar el teléfono móvil, así como también las gafas o todos los objetos que hayamos usado en el exterior antes de entrar en casa.