PSICOLOGÍA

¿Qué es el síndrome de Alicia en el país de las maravillas?

Hay pocos casos registrados en el mundo de este trastorno que adultera las percepciones físicas y sensoriales de los cuerpos.

Paolo Nicolello

El síndrome de Alicia en el país de las maravillas es uno de los trastornos más infrecuentes en el mundo. De hecho, según los datos oficiales, se han registrado menos de 200 casos en el mundo y todavía no hay una documentación consistente. Eso sí, es fácil de reconocer porque los síntomas se asemejan a las vivencias descritas por la protagonista del libro de Lewis Carroll al seguir al conejo blanco. Las personas que sufren este síndrome experimentan cambios de percepción del tamaño, distancia o forma de los objetos que están ante sus ojos o incluso del tiempo transcurrido. A las alucinaciones visuales también se pueden unir las auditivas en una lista de síntomas aparentemente aleatorios.

Aunque es más frecuente en jóvenes, el síndrome de Alicia en el país de las maravillas se da especialmente en niños con algún tipo de predisposición, también se ha observado en ancianos. Se ha especulado mucho con la posibilidad de que Lewis Carroll se inspirara en su propia experiencia para erscribir las aventuras de Alicia porque en sus diarios relata episodios de migrañas. Los afectados pueden ver cuerpos de diferentes tamaños, que se multipliquen o, incluso, que sientan como que su propio cuerpo se ha desdoblado.

Lo habitual es que los episodios se deban a efectos secundarios de medicamentos y drogas, la combinación de enfermedades como la esquizofrenia o de otras circunstancias mezcladas. Los problemas de este síndrome derivan habitualmente en migrañas, infecciones víricas que extienden los síntomas al afectar al sistema nervioso y hasta lesiones cerebrales, aunque habitualmente se resuelven con rapidez.

Síntomas que puede causar el síndrome de Alicia en el país de las maravillas

  • Migraña
  • Distorsión de la percepción de los tamaños de otros cuerpos.
  • Distorsión de la percepción propia.
  • Distorsión de la percepción del tiempo transcurrido.
  • Distorsión auditiva.
  • Pérdida del control de las extremidades o pérdida de coordinación.

«El bolígrafo sobre la mesa lo veo más pequeño». «Tumbada en la cama me siento pequeña». Las afirmaciones corresponden a una niña española de 11 años que durante tres semanas vivió el síndrome de Alicia en el país de las maravillas en una localidad de Guadalajara. En este caso, los pediatras atribuyeron el trastorno a los efectos del 'montelukast', un fármaco para el asma que a veces trastoca el sistema nervioso. Cuando se le retiró el fármaco volvió a percibir adecuadamente el tiempo y el espacio y desde entonces no volvió a vivir como en el cuento de Lewis Carroll.