SALUD

Los suplementos de vitamina D no disminuyen el riesgo de fractura ósea

Una revisión sistémica de los estudios existentes desmiente esta supuesta propiedad de los suplementos de vitamina D y solo recomienda su ingesta en casos muy concretos.

as.com

Nutrimedia, proyecto del Observatorio de la Comunicación Científica (OCC) de la Universidad Pompeu Fabra (UPF), desmiente categóricamente que los suplementos de vitamina D sean recomendables para disminuir el riesgo de sufrir fracturas óseas tras analizar de manera pormenorizada la evidencia científica disponible. De hecho, el organismo eleva a la categoría de mito semejante afirmación.

La guía del PAPPS (Programa de Actividades Preventivas y de Promoción de la Salud), publicada por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, recomienda utilizar los suplementos de calcio y vitamina D tan solo en mujeres institucionalizadas, es decir, en mujeres mayores con un déficit nutricional importante y que no pueden exponerse al sol.

De igual forma, también sugiere valorar su indicación en mayores de 70 años con déficits nutricionales importantes, ingesta de calcio inferior a 500-700 mg/día y escasa exposición solar. Para la población general, se recomienda evitar el sedentarismo y el tabaquismo, tomar el sol al menos 10 min al día (bastaría con la cara y las manos), llevar una dieta rica en calcio (entre 1.000 y 1.500 mg/ día) y vitamina D (más de 800 UI/día), así como realizar ejercicio.

¿Por qué es necesaria y cómo se obtiene?

La vitamina D es un nutriente necesario para la salud y para mantener los huesos fuertes. El organismo obtiene esta vitamina de dos formas: mediante la dieta, si bien hay pocos alimentos naturales ricos en este nutriente (principalmente, algunos pescados grasos, como el salmón, el atún y la caballa, además del aceite de hígado de bacalao), y a través de la piel, que la sintetiza de forma natural cuando está expuesta al sol.

La deficiencia de vitamina D, cuando es muy severa, conduce al raquitismo en niños y a la osteomalacia (reblandecimiento de los huesos) en los adultos, pero los suplementos de vitamina D no previenen las fracturas óseas.