Michael B. Jordan: la transformación física del actor que vuelve loca a Nicki Minaj

Es uno de los hombres de moda en Hollywood. Michael B. Jordan, a sus 31 años, se ha convertido en uno de los jóvenes actores de la industria cinematográfica más cotizados del momento y que más pasiones levanta. Y si no que se lo digan a Nicki Minaj, que en la reciente entrega de premios People's Choice Awards tuvo palabras de agradecimiento para Donatella Versace por el diseño del vestido que lucía y también para el propio Michael B. Jordan, al que agradeció por adelantado que fuera a ser él, no sin cierto tono de broma, el encargado de quitárselo esa misma noche.

Sea como fuere, el caso de la mediática cantante, no hace sino confirmar que el actor vive el mejor momento de su carrera gracias a su papel de Adonis en Creed, cuya segunda parte se estrena la semana que viene en EEUU. El actor, que también ha participado, esta vez como villano, en Black Panther, que se estrenó también este año, empezó su carrera como modelo antes de dedicarse definitivamente a la actuación.

De hecho, antes centrarse definitivamente en la gran pantalla, su rostro era muy habitual en televisión gracias a su presencia en series como la mismísima The Wire, en la que interpretó a Wallace, un joven de dura y buen corazón, durante 13 episodios. También fue muy aclamado su papel en Fruitvale Station, cinta triunfadora en los festivales de Sundance y Cannes en la que Michael B. Jordan se pone en la piel de Oscar Grant, un afroamericano que murió en Año Nuevo de 2009 tras recibir un disparo de la policía.

El entrenamiento del hijo de Apollo

Pero sin duda ha sido su interpretación de Adonis Creed, entrenado por Rocky Balboa, la que le ha catapultado a la fama. Un papel para el que el actor californiano ha tenido que transformar su físico. Y de qué manera. Ya que, a pesar de que no se ha caracterizado nunca por estar en baja forma precisamente, de un tiempo a esta parte ha desarrollado su musculatura hasta cotas insospechadas. Un resultado que tiene que agradecer en gran medida a su entrenador Corey Calliet, que ha compartido los secretos de su rutina de entrenamiento.

"Para Black Panther quería asegurarme de que hiciéramos mucho entrenamiento de fuerza a diferencia del que hicimos para su papel en Creed por lo que trabajó mucho con pesas y la alimentación fue diferente. Cuando se entrena para una película de boxeo, se necesitan muchos ejercicios pliométricos, correr y rutinas que se centren en la condición física, además de trabajar la técnica", asegura Calliet, que destaca la implicación del actor ya que se entrenaba hasta dos y tres veces al día, seis días a la semana, y realizaba seis pequeñas comidas en las que eliminó el azúcar y los productos lácteos, entre otros. Un sacrificio que ha dado resultados.