VUELTA AL COLE

Las crisis asmáticas aumentan con el inicio del curso escolar

Los pediatras alergólogos suspenden o reducen el tratamiento del asma durante el verano en niños con bajo riesgo en esta época antes de que llegue el pico alto del otoño.

Marcial Guillén

La vuelta al cole ya es una realidad. Según la edad de los niños, ya están empezando el curso escolar y a partir del día 10 lo harán la gran mayoría de los niños y hasta Bachillerato. Es por eso que dentro de poco muchos niños empezarán a ponerse malos, es una regla no escrita.

Por eso, volver a tomar la medicación preventiva tras la vuelta de las vacaciones puede contribuir a reducir el riesgo de crisis asmática en las primeras semanas del curso escolar, según advierte la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP). La SEICAP aconseja que aquellos niños cuyo pediatra alergólogo haya recomendado reducir o suspender el tratamiento preventivo durante el verano no olviden retomarlo unas dos semanas antes de que comience el colegio.

Uno de cada diez niños en edad escolar tiene asma, según datos de SEICAP. "Con el comienzo del curso estos menores entran en contacto de nuevo con otros compañeros, lo que suele traducirse en un incremento de las infecciones respiratorias, una mayor exposición a los ácaros de polvo y más posibilidades de cambios de temperatura y humedad, que son propios del mes de septiembre", afirma el doctor Lozano.

Por ello, las visitas a urgencias aumentan con respecto al verano como consecuencia de un incremento de las crisis asmáticas debidas a estos factores. De hecho, otro estudio publicado en BioMed Research International concluye que el punto máximo de exacerbaciones de asma en niños en edad escolar tiene lugar a principios de otoño y en primavera.

Tratamiento preventivo para el asma

El tratamiento preventivo se conoce también como tratamiento de mantenimiento, profiláctico o continuo, entre otros, y se utiliza cuando el niño padece síntomas de asma u otras alergias de forma repetida o grave. "En el caso del asma, consistirá principalmente en corticoides inhalados y su objetivo es evitar la sintomatología o hacerla lo más leve y menos frecuente posible, para reducir las posibilidades de sufrir una crisis y no tener que recurrir a la medicación de rescate", explica la doctora Cristina Ortega Casanueva, miembro del Grupo de Trabajo de Alergia Respiratoria y Asma de SEICAP.

Así, el niño podrá desarrollar sus actividades habituales con más facilidad: "tendrá más tolerancia al ejercicio físico, dormirá mejor, acudirá menos al médico, tendrá menos absentismo escolar, y, por lo general, mejorará su calidad de vida, al incrementar también su confianza y autoestima", sostiene.