NUTRICIÓN

El 'botox’ también es efectivo contra la migraña crónica

El 80 % de los pacientes con migraña crónica tratados con toxina botulínica durante un año muestran más de un 50% de reducción en el número de días de dolor de cabeza al mes.

Pindyurin Vasily

La Sociedad Española de Neurología acaba de presentar un estudio sobre la toxina botulínica como tratamiento de la migraña crónica. Ha sido publicado en el 'European Journal of Neurology', y se vieron efectos positivos como la disminución de discapacidad y en el consumo de medicamentos y recursos sanitarios.

Durante 12 meses se registraron los días de dolor de cabeza, la intensidad, la medicación sintomática administrada, las visitas a urgencias y los días de discapacidad que experimentaron los pacientes que comenzaron su tratamiento con toxina botulínica.

Más del 66 % de los pacientes respondieron de manera positiva al tratamiento en los primeros tres meses y, tras un año, casi el 80 % de los pacientes con migraña crónica mostraron más de un 50 % de reducción en el número de dolores de cabeza por mes. Además, de la utilización de tratamientos y medicación complementaria.

Tras ese año de prueba, el 95 % de los pacientes no mostraron efectos secundarios. No obstante, el principal hallazgo de este estudio es que las posibilidades de que este tratamiento sea eficaz aumentan cuanto menos tiempo pasa entre el momento en que se cronifica la migraña y el inicio del tratamiento.

"Comenzar el tratamiento con toxina botulínica en el primer año después del diagnóstico de migraña crónica aumenta las posibilidades de que los pacientes tengan una respuesta óptima al mismo. Por esa razón, es necesario subrayar la importancia de reducir el tiempo entre el diagnóstico de migraña crónica y el inicio del tratamiento. Sobre todo si tenemos en cuenta que, en España, al menos un 25% de los pacientes que sufren de migraña nunca ha consultado su dolencia con el médico", destaca la doctora Patricia Pozo Rosich.

En España más de un 70 % de los pacientes con migraña presentan una discapacidad grave y un 14 % una discapacidad moderada. La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera a la migraña como la segunda enfermedad neurológica más discapacitante.