SALUD CARDIOVASCULAR

Apunta estas 6 maneras de bajar la edad de nuestro corazón

¿Cómo puedes reducir tu riesgo de ataque cardíaco o accidente cerebrovascular a cualquier edad? Vamos a darte algunas claves para bajar la edad de tu corazón

Haz un cálculo de tu edad cardiovascular. Puedes verte y sentirte joven, ¿pero puedes decir lo mismo de tu corazón? La edad del corazón es un concepto que fija el riesgo de tener un ataque al corazón o un derrame cerebral. Hay factores que no se pueden cambiar o controlar: envejecer, ser hombre o tener un historial familiar de enfermedad cardiovascular. Luego, están los factores que sí puedes tener bajo control: fumar, hacer ejercicio, nutrición y alcohol. También hay factores ocultos que no causan síntomas pero aumentan el riesgo, como presión arterial alta, colesterol o glucosa en sangre.

Monitoriza tu salud. Los menores de 40 años generalmente tienen bajo riesgo, pero deben ver a su médico de cabecera si un familiar cercano ha tenido un ataque al corazón o un derrame cerebral a una edad temprana (menos de 55 para un pariente masculino, menos de 65 para una mujer). Puedes comprar un kit de prueba de colesterol y medir tu presión arterial en casa, pero también es quizá más conveniente visitar al médico.

Deja de fumar. Al menos un tercio de todas las enfermedades cerebrovasculares son atribuibles a cinco factores de riesgo: tabaco, presión arterial alta, alcohol, colesterol alto y obesidad, en ese orden de importancia. Otros factores son el sedentarismo y una dieta pobre en frutas y verduras. Por lo tanto, para bajar la edad de tu corazón, empieza por dejar de fumar. Es difícil, sí, la nicotina es más adictiva que la heroína, pero si valoras tu salud, es lo más valioso que puedes hacer por ella.

Baja tu presión arterial. Una presión arterial ideal se encuentra entre 90/60 y 120/80 y se considera alta si está constantemente por encima de 140/90. La presión arterial aumenta a medida que envejecemos, engordamos, tenemos menos actividad, bebemos más alcohol y comemos más sal. Es posible tener una tendencia hereditaria a la presión arterial alta, por lo que incluso si eres una persona delgada, abstemia, te ejercitas y sigues una dieta saludable, se puede recomendar tomar medicamentos para mantener la presión arterial en el rango normal.

Ejercicio físico. Dos horas y media a la semana de actividad física moderada reduce el riesgo de enfermedad cerebrovascular en un tercio, aproximadamente. Cualquier actividad es mejor que ninguna y una actividad vigorosa es probablemente mejor que un ejercicio más pausado, aunque es lógico que en personas mayores más debilitadas por la edad, caminar sea un ejercicio más que suficiente.

Echa un ojo a tus niveles de colesterol. El colesterol es una grasa que se encuentra en los alimentos (por ejemplo, carne y productos lácteos) y se produce en el hígado. El colesterol total que circula en la sangre se compone de lipoproteína de baja densidad (LDL), que obstruye las arterias, y lipoproteína de alta densidad (HDL), que es protectora. Para interpretar tus niveles de colesterol, debes tener en cuenta otros factores de riesgo para obtener un puntaje de riesgo general. Si es alto, se te recomendará hacer más ejercicio y una dieta baja en colesterol. Si eso no funciona, te ofrecerán alternativas en forma de medicamentos, como las estatinas.