David González: “Intentaron envenenarme al pedirme una foto”
El Skater Of The Year 2012 aprovecha su regreso a Medellín (Colombia) para publicar una parte y hablar de su carrera en una entrevista en Thrasher Magazine.
En una humilde casa en las colinas de Medellín, Colombia, David González explica que al inicio de la pandemia “vine por 15 días y cuando tenía que volver el mundo paró. Cerraron fronteras. Por un año. La hostia”. Confiesa que fue difícil adaptarse: “Llevaba 15 años fuera, había vivido ya más tiempo de mi vida en Estados Unidos que en casa”. Y decidió adaptarse con lo que mejor sabía hacer, “patinar”. Y se volvió a enamorar del skate tras dos años patinando sin notar ese sentimiento. “La Covid me salvó”, concluye.Lo hace en una entrevista de Michael Burnett para Thrasher Magazine. En ella, el SOTY del 2012 gracias a una parte, Possessed to skate, con un banger tras otro, se sincera sobre su carrera. Y aprovecha para sacar un poco de acción y confesiones con el filmer Chris Gregson.En la entrevista habla de la escena del skate en Colombia: “No es como antes porque antes éramos los únicos y había tres skateparks y dos tiendas con material americano. Ahora hay 10 skateparks, mucha gente patinando, más tiendas y la mayoría del material es de aquí. La escena ha crecido, aunque todavía le falta un punto para que la gente empiece a ganarse la vida con ello como ocurre en Brasil”.También se sincera sobre los prejuicios relativos a la seguridad en el país. En este sentido reconoce que “es muy peligroso ser famoso aquí. La gente sabe que tengo dinero. Tengo que vigilar, pero sé dónde ir y cómo moverme”. Y llega a explicar que trataron de envenenarle: “Creo que simplemente querían robarme. Fui a un centro comercial, me pidieron una foto y mientras me la hacían empecé a encontrarme fatal, con ganas de vomitar. En ese momento lo paré todo y me fui corriendo. Estuve 10 días en el hospital”.Problemas los hay en todas partes. En América, por ejemplo, los tuvo con los calmantes: “Me lesionaba mucho y allí te dan calmantes como si fueran agua. No tenía ni idea de lo malos que eran para mí. De repente te das cuenta de que estás enganchado. De hecho fue lo más difícil de dejar. Incluso la marihuana fue más fácil: llevo dos años sin fumar y estoy muy tranquilo”.Obviamente, en la conversación sale ese SOTY 2012: “Tenía 21 años. Mi primer sueño era convertirme en profesional y una vez lo conseguí pasó a ser el SOTY. También lo logré. Era muy joven, hacía lo que me daba la gana. Tenía mucho dinero. Estaba con cualquier chica que quisiera. Salía de fiesta todo el día. Fumaba mucha marihuana y literalmente llevaba vida de rock star”. Pero todo tiene un final: “Para nada pensaba a largo plazo. Dos años después me rompí el tobillo y fue como despertar de golpe. Tenía que aflojar, empezar a pensar en el futuro, no gastar todo mi dinero. Estuve un año sin patinar. Fue una lección. Dos años así. Me echaron de Volcom. Fue un bajón. No era depresión, pero sí bajón. No culpo a nadie, fue todo cosa mía, de mi actitud”.La mayor demostración de que David González ha cambiado la da al final de la entrevista, cuando le preguntan por una frase en su primera entrevista en Thrasher en la que dijo “no me importa morir”. Ahora confiesa que “sí que me importa, soy mayor, las cosas se ven diferente”.Finalmente, en cuanto al futuro, no tiene claro qué hará: “No digo que me vaya a quedar aquí porque todavía tengo una casa en Long Beach y puedo ir en cualquier momento. Ahora prefiero estar aquí. Es más barato, tengo mejor vida y puedo ayudar a mis hermanos, primos, amigos... Es lo mejor de tener dinero”.