Los tiburones toman Long Island: 5 ataques en tan solo 2 semanas
La cuarta víctima era un surfista. Ninguno de los ataques ha sido mortal, pero la coincidencia en le tiempo ha puesto el miedo en el cuerpo a la población.
Las autoridades del Condado de Suffolk han comunicado que este miércoles, un surfista ha recibido el ataque de un tiburón cerca de Smith Point Beach, en Long Island (Nueva York, Estados Unidos). Creen que se trata de un tiburón tigre, cuyo mordisco dejó una herida de 10 centímetros en la pierna del surfista.
Lo curioso del caso es que la víctima se encontraba sobre su tabla de Paddle Surf. Con el ataque, fue derribado y, según su relato, dio un puñetazo al tiburón, que parecía que tenía intención de seguir con el ataque. Afortunadamente, afirman, una ola llevó al surfista y a su tabla de regreso a la orilla antes de que la cosa fuera a peor. Ya en la orilla, los socorristas ayudaron al surfista y llamaron a los servicios de emergencias, quienes le atendieron y pudieron evitar daños mayores.
Desde el Gobierno del Condado explicaron que el ataque al surfista "es un indicativo de que estamos ante una nueva normalidad en la que los tiburones parecen estar más cerca de la costa, por lo que habrá más interacciones entre ellos y los humanos". Añadía también que, por suerte, "de momento no ha habido grandes heridas/lesiones y esperemos que no las haya, pero hay que se consciente de que existe esta posibilidad". Así, advirtió a bañistas y surfistas de que "mejor no meterse en el agua cuando no hay socorristas, por lo cual mejor evitar el anochecer y el amanecer, no usar joyas brillantes y no meterse en el agua en caso de estar sangrando".
Todo ello porque el surfista era ni más ni menos que la cuarta víctima por ataque de tiburón en tan solo 2 semanas en la zona de Long Island. Pocas horas después, un hombre de 49 años de Arizona recibió un mordisco en la muñeca y en las nalgas estando parado con el agua hasta la cintura. Sería la quinta víctima. Antes, el primero en recibir un ataque había sido un nadador de 37 años el 30 de junio, en Jones Beach. Cuatro días más tarde le ocurría lo mismo a un socorrista en un simulacro de rescate, mientras simulaba que se ahogaba (recibió un mordisco en el pecho y en la mano) para los que solo necesitó un par de puntos y antibióticos. Y finalmente, en menos de una semana y a unos 150 metros de la orilla, en plena operación de rescate, otro socorrista recibió el mordisco de un tiburón en el tobillo que únicamente le supuso unas heridas leves.