En rueda de prensa, el Ministro de Asuntos Regionales italiano, Francesco Boccia, ha anunciado la decisión de "cerrar todas las estaciones de esquí del país con una ordenanza firmada por protección civil".

La propagación del coronavirus por Italia -especialmente en el norte- y algunas decisiones de usuarios y estaciones han obligado al país a tomar medidas cada vez más drásticas para su contención. Tanto es así que en un primer momento habían establecido por decreto que se cerraban todas las estaciones de esquí de la zona más afectada: Lombardía.

Sin embargo, este miércoles día 11 se hace efectivo el cierre de todas las estaciones de esquí del país y se da por finalizada la temporada, algo que no ocurría desde la II Guerra Mundial. Ello implica estaciones de renombre como Livigno o el mayor dominio esquiable del mundo, el Dolomiti Superski.

El motivo es obviamente el intento de contener la propagación del virus, que parece que crece sin control en Italia. Sin embargo, mucho han tenido que ver también las 'triquiñuelas' de algunas personas y estaciones de esquí ante las primeras medidas adoptadas. En este sentido, los medios locales hablan de casos de infectados que se han saltado el confinamiento para ir a esquiar en estaciones de esquí lejanas, resorts que cerraban telesillas de la zona afectada pero mantenían abiertos los que caían en otra zona e incluso alguna como Abettone que ofertaba 'forfaits a 1€' para estudiantes para esta semana -acompañados de un adulto- aprovechando el cierre de colegios y empresas.