Dentro del turismo de aventura existen múltiples actividades y una de ellas es el buceo, que tiene también múltiples opciones. Una de ellas es la observación de tiburones en puntos de gran concentración del gran depredador marino, como Isla de Guadalupe (México).

Allí es donde sucede este hecho, denunciado por el activista Arturo Islas Allende a través de sus redes sociales. Se trata, ni más ni menos, de la muerte de un gran tiburón blanco que queda atrapado en una de estas jaulas de observación para turistas mientras los buzos lo observan. La escena dura 25 minutos, hasta que fallece.

Según explica Arturo Islas Allende en el vídeo de denuncia, el responsable de dicha muerte es el canadiense Mike Lever, dueño de dos barcos que realizan esta actividad. En este caso, el afectado es en Nautilus, que en palabras del propio activista "ni se adaptó a la nueva normativa ni sus buzos hicieron nada para evitar la tragedia".

La normativa a la que se refiere se aprobó en 2017 tras la entrada de un tiburón en una de las jaulas, motivo por el que se ordenó a quienes realizaban la actividad que hicieran más estrecho el espacio entre barrotes y que las fabricaran de un material más fuerte. Según Islas Allende, "no todos hicieron adecuaciones" y por ello presentará "una denuncia contra Lever para que le retiren los permisos en aguas mexicanas".

Y aunque tras el primer vídeo se ha comentado que el tiburón luego se iba nadando sin problema, el activista ha subido un segundo vídeo en el que se puede apreciar como el tiburón blano acaba finalmente cayendo en dirección al fondo del mar de Isla Guadalupe sin movimiento alguno:

Al mismo tiempo, Arturo Islas Allende acusa a la responsable del área natural protegida, Marisol Torres, por no haber actuado a pesar de "saber que eso había pasado". De momento, no hay noticias de que alguien haya tomado medidas al respecto.