Teresa Fernández-Miranda afrontaba este fin de semana su participación en el primer campeonato europeo de BMX Freestyle que organiza la UCI, y lo ha hecho demostrando que pocas riders en el continente pueden hacerle frente en lo que a estilo y flow se refiere.

La rider pucelana —que en 2018 se proclamó campeona del mundo de la Vans BMX Pro Cup—, llegó al park de la localidad suiza de Cadenazzo con la intención de hacer valer sus mejores armas y así es como logró ayer domingo quedarse a un paso del pódium al conseguir 73,20 puntos con su ronda final, cuarta mejor puntuación de la tarde.

Por delante de ella tan solo quedaron la rusa Elizaveta Posadskikh (82,80), la alemana Lara Lessmann (84,60) y la británica Charlotte Worthington (91,60), que ocuparon la tercera, segunda y primera posición respectivamente. En categoría masculina el francés Anthony Jeanjean logró el título europeo por delante del croata Marin Rantes y el británico Declan Brooks.

Este nuevo resultado refrenda las posibilidades de Teresa para optar a una plaza en Tokio 2020, cita olímpica en la que el BMX Freestyle se estrenará en la programación como deporte invitado, al igual que otras disciplinas de deportes de acción como el Skate y el Surf. En los próximos días la rider de la RFEC pondrá rumbo a China donde le esperan dos citas importantes en su camino hacia Tokio, una prueba de la Copa del Mundo y los Mundiales de la UCI de BMX Freestyle.

Además de Teresa, tres integrantes más de la selección nacional participaron en el Europeo de Cadenazzo. Se trata Gemma Corbera, Erick Ponce y Arkaitz Armendariz, que —tras un destacado papel por parte de los tres hace unas semanas en el Happy Ride Weekend— no lograron pasar a la final del domingo en sus respectivas mangas clasificatorias.