Glassy - A basque women surf film

"Un proyecto cuyo objetivo es motivar a las futuras generaciones y concienciar a los espectadores sobre las dificultades con las que se encuentran las mujeres en el deporte". Así define Leire Garmendia el fin con el que rodó Glassy, a basque women surf film.

Por no hacer muchos spoilers pero sí para que el espectador se pueda hacer una idea de qué se puede encontrar al darle al play, aquí van algunos momentos destacables del film:

El documental empieza con una serie de imágenes y declaraciones de tres pioneras del surfing en el País Vasco: Mar Eizaguirre, Marijose Urteaga y Myriam Imaz. Un fragmento que pone en contexto lo duros que fueron los inicios y en el que hay frases tales como "las competiciones de chicas eran una serie de jueces que, cervecita en mano y en las peores condiciones del día en el agua, decidían cuál era el culo más bonito".

Tras ello intervienen varios perfiles de reconocidas surfistas vascas de la actualidad que, por un lado, transmiten todo lo bueno que les aporta el surf a través de palabras pronunciadas con pasión y sonrisas de felicidad; y por el otro, las dificultades que se encuentran en el día a día.

Es impactante escuchar por ejemplo a Sonia Ziani, freesurfer de Orio, que habla de su origen musulmán y la bronca que recibió la primera vez que surfeó ("¡una mujer entrando al agua!") o las situaciones surrealistas que se ha encontrado trabajando de cara al público en Pukas.

Es curioso, por otra parte, ver cómo una Nadia Erostarbe que cuando grabó Glassy tenía 17 años y empezaba a cosechar buenos resultados, dos años después se ha convertido en campeona de Europa Junior de la WSL y ha ganado sus primeros QS1500. En la actualidad es la número 32 del mundo en el QS...

Y es más que interesante escuchar también a su hermana June hablar de por qué compite con la selección de surf de Suiza; las reflexiones sobre la evolución del surfing femenino de la boca de una referente como la vizcaína Garazi Sanchez; el cambio que dio la vida de Ainara Aymat hace un par de años; o la pasión con la que se refiere al surf la pequeña Janire González-Etxabarri, que tiene claro por qué se mete en el agua: "Para coger buenaas olas, hacer amigos y disfrutar".

Una reflexión final de todas ellas, entre las que se cuenta una 'anécdota' del día de la mujer, pone en valor lo que se ha ido avanzando en el deporte femenino, a la vez que invita a seguir surfeando y peleando para que un día exista la igualdad absoluta. Se cumple, así, el objetivo de Glassy.