A pesar de los avances de los últimos años en igualdad de género, “falta una apuesta de verdad, una apuesta consciente”, decía Leticia Canales en un reciente reportaje en As Acción. Sus palabras me han venido a la cabeza varias veces durante este fin de semana, en el que la FISE estrenaba las European Series con una parada en Madrid en la que había competiciones de skate y bmx.

Debería considerarlo el festival de referencia en deportes de acción en Europa, puesto que es capaz de reunir a 500.000 personas en Montpellier y tiene pruebas en todo el mundo (Japón, Canadá, China…), entre muchos otros logros. Sin embargo, no puedo hacerlo. Para mí no lo será hasta que trate de la misma manera a chicos y chicas.

No puedo considerar como referencia a un festival que no de premios paritarios. En Madrid ha dado como premio 3.000, 2.000 y 1.000 euros a los tres primeros clasificados en categoría masculina de skate y bmx mientras la primera chica de ls mismas disciplinas se lleva 800 euros.

No puedo considerar como referencia a un festival que solamente ofrece streaming de dichas finales masculinas y que no me permite disfrutar del espectáculo que dan en la categoría femenina; que permite que padres y madres puedan ver en acción a sus hijos pero no a sus hijas. .

No puedo considerar como referencia a un festival que en su zona de prensa solamente tiene fotos de las finales de skate y bmx masculinas; y que en YouTube solo sube las rondas ganadoras de dichas categorías, incluyendo hasta las semifinales. Pero de las femeninas, ni rastro.

Finalmente, aunque poco tenga que ver con la parada de Madrid, no puedo considerar como referencia a un festival que celebra la parada de ‘estreno’ de las World Series en un país como Arabia Saudita en el que a las mujeres no se les permite participar. Lo siento pero no puedo.

Del mismo modo que me alegra que quienes organizan los mayores eventos del sector se interesen por España, les pido -por favor- que si la experiencia de FISE Madrid 2019 consideran que ha sido un éxito y quieren volver, se replanteen todas estas faltas de respeto a las mujeres, que viven estos deportes tanto como los hombres. Porque si queremos ir diciendo que estos deportes no son como el fútbol, un deporte en el que justamente hoy se ha sabido que hacen coincidir el horario de la última jornada de La Liga (masculina) con la final de la Champions femenina (en la que juega el Barça), estaría bien demostrarlo. Todos. Y todas.