Van der Poel se queda solo: “¿Tiene sentido verlo?”
El neerlandés, según las últimas informaciones, será al único componente del Big Three que disputará los Mundiales de ciclocross, sin Van Aert ni Pidcock.
Wout van Aert y Mathieu van der Poel coincidirán, según sus calendarios oficiales, seis veces en la presente temporada de ciclocross. No lo harán en los Mundiales, que se celebrarán en la ciudad checa de Tabor el día 4 de febrero. La fecha sí está en los planes del neerlandés, pero no figura en el calendario del belga, que tiene en el Giro de Italia su principal objetivo del año que viene. Tom Pidcock, la tercera pata del Big Three del barro, tampoco parece que vaya a participar en la cita planetaria. “Disputará varias carreras durante el ajetreado período de fin de año y no alargará mucho más. Un poco similar a la temporada pasada. No creo que esté en los Mundiales”, ha declarados su entrenador, Kurt Bogaerts, en el medio belga Het Laaste Niewsblad.
La baja deja “solo” a Van der Poel, que suma argumentos para conseguir su sexto maillot arcoíris. El triunfo, además, permitiría al neerlandés situarse a una victoria de Eric De Vlaeminck, líder del palmarés. “El ganador ya se conoce”, ha llegado a afirmar el hermano del corredor belga, Roger, leyenda del ciclismo con 161 victorias profesionales, ante la situación. “Es 100% seguro, porque lo que queda en la competición es de segunda categoría. Siento decirlo así, pero el resto es claramente inferior, todo el mundo lo sabe. Eli Iserbyt, Michael Vanthourenhout y Thibau Nys se disputan el segundo puesto. ¿Sigue teniendo sentido verlo? Yo seguiré sentado delante de mi televisor, sobre todo porque Van der Poel es mi corredor favorito, pero eso no le servirá de nada a la gente”, valora en Het Nieuwsblad.
En un año con muchos alicientes, Van Aert, como se anticipaba, tiene el Giro como gran objetivo de la temporada. Pidcock, por su parte, quiere defender su oro olímpico en mountain bike. Con el calendario de carretera como principal foco, se quitará desgaste físico en el barro. “No se equivoquen. Tom tiene muchas ganas de practicar ciclocross, pero sigue siendo un extra. Es clave apuntalar bien su estado físico y asegurarse de que no se descomponga durante la temporada”, añade Bogaerts en sus palabras. “Pidcock está en su derecho de centrarse en el mountain bike, pero los Juegos Olímpicos no son hasta agosto. Lo de Van Aert aún es más incomprensible. Estar en el ciclocross no tiene tanta influencia después. Van der Poel se proclamó campeón del mundo el año pasado (se refiere a su victoria en ciclocross) y ¿qué hizo posteriormente? Ganó la Milán-San Remo y la París-Roubaix”, contrapone De Vlaeminck.
Polémica por la participación
Las bajas de Van Aert y Pidcock de cara a los Mundiales llegan en un momento de cierto malestar dentro del mundo del ciclocross debido a las ausencias en las competiciones. Tras la renuncia de Nys a participar en la Copa del Mundo de Dendermonde, habiendo competido la semana anterior en el Superprestige de Niel, el presidente de la UCI, Peter Van den Abeele, amenazó con tomar cartas en el asunto. “Si un corredor de cross prefiere una competición nacional mientras hay Copa del Mundo, no participará en la próxima Copa del Mundo y, por tanto, tampoco en los Mundiales. La Copa del Mundo no es una competición en la que puedes elegir qué quieres correr. Todo el mundo tiene que participar”, advirtió. El caso es distinto al de Van Aert o Pidcock, con un trato especial por su desempeño en carretera, pero la temporada de ciclocross sigue perdiendo brillo.
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