De Vicálvaro al UAE: los hermanos Torres ‘conviven’ con Pogacar

Pasadas las 10 de la mañana, aparecen Pablo Torres (20 años) y su hermano Jaime (18) en el Parque de la Vicalvarada de Madrid. Ambos viven en el barrio de Vicálvaro, aunque se acercan en coche (en el de sus padres) para tardar menos de cara a irse luego a entrenar, ya que Pablo tenía cuatro horas por delante. Justo un año atrás, en el mismo punto, el del UAE tuvo otro reportaje con AS el día en el que este medio anunció su salto al primer equipo hasta 2030.

Terminada la primera temporada toca hacer balance (“y que lo repitamos cada año”), pero esta vez será especial por la compañía de Jaime, también procedente del Sanse (San Sebastián de los Reyes), una cuna de talentos y que ficha para 2026 por el Gen Z, equipo filial del UAE en el que estuvo Pablo. Hechas las fotos, y para llevar mejor el frío, Pablo lleva a AS a la misma cafetería que hace un año. Los dos hermanos se piden un refresco cero (no les gusta el café) para empezar la conversación.

Pablo, pese a algunas lesiones durante el año, tuvo actuaciones destacadas, logrando incluso podios en generales como las del Giro d’Abruzzo y ayudando al equipo, mientras que Jaime destacó en el campo júnior. “Fue un año duro, de cambio grande y en el que se nota la diferencia. También me faltó continuidad en algunos momentos por las lesiones, pero igualmente me sirvió de mucho aprendizaje y experiencia para los próximos años. Tengo muchos años firmados y el equipo me dice que debo tener calma, crecer poco a poco, hacer bien las cosas para convertirme en un gran ciclista y que eso lleva su tiempo”, explica Pablo, ante la atenta mirada de Jaime, al que se dirige.

“Es una ilusión que esté con nosotros en el mejor equipo del mundo y, aunque sea otra categoría, ojalá podamos compartir alguna carrera (los del filial pueden competir con el primer equipo si la prueba no es World Tour)”, añade el mayor, a lo que responde el hermano pequeño con ilusión. “El año pasado me invitaron a la concentración y ya era un sueño. Quiero aprovechar esta oportunidad, hacerme un hueco y aprender. Sé que puedo hacerlo bien y que seguramente mi mayor carencia sea el manejarme en el pelotón, y eso es algo en lo que vamos a trabajar fuertemente. En julio me dijeron ya que me fichaban y fue increíble”, explica Jaime.

Y, por si fuera poco, además de vivir juntos en casa (Pablo se emancipará en breve si todo va bien), lo hacen en la misma habitación… y en la misma litera. “Tenemos el salón lleno de bicis y mi madre no para de quejarse (entre risas) porque están en el medio. Al usarla todos los días es lo más cómodo”, explica Pablo, y es que sus padres no fallan en cada carrera a la que van, aunque ahora les toque repartirse. Uno de los retos del corredor del UAE en este 2025 fue el Tour del Porvenir, y más tras el segundo puesto de 2024. Acabó séptimo.

“Seixas (ganador), Widar, Finn… el nivel era muy alto, y ya lo están demostrando algunos en profesionales. Hubo cosas que podría haber hecho mejor, pero salió así y acabé contento. Con el cambio de normas (los World Tour ya no podían participar en los Mundiales de categorías inferiores) no pude estar en los Mundiales, y fue una pena porque el año anterior a mí sí me tocó correr contra corredores del World Tour. Cambió la norma y me afectó negativamente. Es lo que toca”, explica uno de los pupilos de Matxin, y es que el vasco también valora en AS el curso del madrileño.

“Fue un año complicado para él. A todos les gusta ganar, y no hubiese sorprendido si él lo hubiese hecho este año, pero eso no es un problema y no hay que presionar. Su hermano Jaime también tiene buen motor y margen de mejora, que eso es lo importante, para evolucionar cada año. Los dos son muy serios y trabajadores, y eso se nota, y en casa respiran ciclismo”, añade el vasco, en Benidorm ahora para la presentación del equipo, que será este sábado.

En el ciclismo actual, cada temporada el salto es más grande, y así lo explica Pablo: “Este año mejoré prácticamente todos mis números en esfuerzos cortos, también de hasta 20 minutos e incluso de una hora. También gané algo más de peso, que es potencia (su entrenador es Javier Sola, el mismo que el de Pogacar), pero me queda por progresar. El año pasado, en la etapa que gané del Porvenir (jornada reina), lo hice por más de un minuto al segundo. Este año con esos números, incluso algo mejores, aguantaban casi 10 personas en el grupo. Cada año se va más rápido”. Jaime, que se define como “escalador” tenía de referente a Contador, después a Pogacar... y ahora a su hermano. “Ojalá tener una carrera como la suya”, dice, y eso que es solo el comienzo. Y esperan hacerlo juntos. De Vicálvaro a ser compañeros de uno de los mejores de siempre. Y el futuro dirá hasta dónde llegan.

La trilogía al completo: Celia también se une

Celia (18 años) y Jaime son mellizos, mientras que Pablo es escasos dos años mayor que ellos. Ella empezó en el ciclismo más tarde, y es que al final ‘cedió’ de tanto ir a ver a sus hermanos. “Ella empezó un poco más tarde que nosotros. Siempre venía a vernos, pero decía que no se apuntaría. Yo salgo casi siempre con ella a entrenar y Pablo, al tener entrenamientos más largos, se iba él, pero solemos ir alternando últimamente”, cuenta Jaime sobre una Celia que también estará en la familia UAE en 2026 tras fichar por el equipo femenino de desarrollo.

En el ‘élite’ están corredoras como Paula Blasi y Mavi García, dos referentes españolas. El día de la quedada de AS con Pablo y Jaime en Vicálvaro, Celia no pudo acudir al tener un examen, pero sí pudo valorar para este medio lo que supone el fichar por la misma estructura que sus hermanos. “Dar el salto al equipo de desarrollo del UAE es un orgullo porque es uno de los mejores del mundo, y cuando empecé a competir en el ciclismo incluso hubiese pagado por conseguirlo. Tenía un objetivo en mente, que era intentar dar el salto a un equipo profesional, y hacerlo con el UAE es un honor”, explica Celia.

La de Vicálvaro también comparte vivienda con sus hermanos en dicho barrio madrileño: “Hemos crecido juntos y estamos muy felices de estar en una situación así. Vamos a disfrutar de la experiencia”. Fue Matxin, mánager del UAE, según reveló a AS, el que propuso el nombre de Celia a la estructura femenina y, viendo los datos, no dudaron.

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