Javier Guillén: “Pogacar nos ha comentado que tiene la Vuelta en su calendario”

-¿Es posible que en 2022 veamos la mejor participación de la historia en la prueba?

-Bueno eso habrá que verlo en la salida. Ahora estamos en una primera fase en la que te van confirmando intenciones pero una cosa diferente es cuando salgamos de Utrecht. Además, tradicionalmente la Vuelta ha contado con los mejores corredores del mundo. Yo, como Director de carrera, suelo echar de menos a los que no pueden venir pero, ahora mismo, estamos muy satisfechos con las confirmaciones que vamos teniendo.

-¿Qué corredores se pueden anunciar ahora mismo?

-Pues Evenepoel, Landa, Carapaz, Mas o Valverde. Pogaçar nos ha comentado que tiene la Vuelta en su calendario pase lo que le pase en el Tour. Pero, repito, todavía es muy pronto para asegurar quiénes van a estar en la línea de salida. Lo que está claro es que siempre hay mucha emoción y un gran nivel porque las carreras que organizamos no se deciden hasta los últimos días. Roglic, por ejemplo, que ha dominado en los últimos años, parece ser ahora el único corredor capaz de plantar cara a Pogaçar.

-Ha quedado un trazado muy interesante para la edición de 2022, ¿no?

-Estamos muy contentos porque sabemos del esfuerzo que hacen los gobiernos autonómicos, las diputaciones o los ayuntamientos. Ellos son los que nos permiten montar el teatro y luego la segunda parte es el tema de los actores que salen a actuar, los ciclistas. Nos parece que tendremos una gran edición con el esfuerzo de todos.

-Es admirable la implicación de los responsables políticos con la Vuelta. En Euskadi, por ejemplo, ya no hay debates y se asume con normalidad que pase por aquí.

-Este año partimos de los Países Bajos, muy cerca de la frontera con Bélgica y el primer contacto con nuestro territorio natural será Euskadi. Estamos hablando de las mejores aficiones del mundo en la primera semana de carrera. Comenzaremos un viernes con una crono por equipos, estaremos en Utrecht y Brabante y luego realizaremos el traslado rumbo a Vitoria el mismo domingo por la tarde.

-¿Han encontrado buenas condiciones en la capital alavesa?

-Sensacionales, en todos los sentidos. Tiene un aeropuerto maravilloso y una buena capacidad hotelera. Vamos a estar tres días y luego haremos las etapas entre Vitoria y Laguardia, la Irún-Bilbao y la Bilbao-Pico del Jano que se presenta mañana mismo en Cantabria.

-¿Cuánta gente mueve una Vuelta?

-Entre 2.500 y 3.000 personas. Esa es otra de las causas por las que se suele apostar por un evento como este. Mira, el día 23 de agosto salimos de Vitoria, que tiene más de 250.000 habitantes y llegamos a Laguardia, que cuenta con 1.500. Este es el único deporte del mundo que puede alardear de conseguirlo.

-¿Tienen calculado el impacto económico que dejan como huella?

-Entre 250.000 y 325.000 euros por día. Depende de la capacidad de hotelería en particular y de hostelería en particular de los lugares por los que pasamos. Son los ciclistas, sus equipos, los patrocinadores, instituciones, organización y logística. Hablamos de cifras muy importantes. Además mostramos y damos publicidad a pueblos, ciudades o, en este caso, bodegas de vino y paisajes de viñedos. Laguardia es una localidad amurallada muy bella. Y lo dice una persona que está viendo continuamente lugares por los que acaba pasando la carrera.

-Estamos viviendo una semana muy extraña por la gran cantidad de casos de COVID-19. Positivos, equipos que se retiran de las carreras y ese tipo de cosas. ¿Es para preocuparse?

-Nosotros pensábamos hacer una Vuelta más abierta este año pero igual tenemos que volver a los protocolos de hace unos meses porque la pandemia no acaba de marcharse y las normas de la UCI son muy claras y estrictas. No hay que descartar que tengamos que cambiar el paso de nuevo.

-¿Están sorprendidos?

-Sí, sí, bastante. Lo que ocurrió la semana pasada nos llamó la atención a todos. Fueron bastantes casos y es una pequeña señal de alarma que nos obliga a estar atentos a la evolución de los hechos.

-¿Fue duro dejar al Caja Rural fuera de la edición de 2022?

-No es agradable tener que tomar esas decisiones y comunicarlas pero es nuestra obligación y tratamos de hacerlo lo mejor que podemos. Teníamos dos invitaciones, conseguimos una tercera con un permiso especial y pensamos que este año tenían que ir el KernPharma, Euskaltel Euskadi y Burgos BH.

-¿Qué espera de la etapa alavesa?

-Me parece un trazado rompepiernas. Vendremos de los Países Bajos, donde hemos visto a todos muy implicados y llegamos a Álava donde mantenemos una gran relación desde hace años con la Diputación Foral y con el ayuntamiento de Vitoria. Pienso que algunos de los gallos pueden mostrar sus intenciones después de la etapas llanas en Utrecht y Brabante. Igual lo intenta Mikel Landa, por ejemplo, que corre en casa. Cualquiera sabe...

-Vitoria fue Green Capital europea hace unos años y alardea de luchar por los valores ecológicos.

-Estamos en la misma línea. Ya usamos bidones biodegradables, nos esmeramos en limpiar los puertos cuando pasamos por ellos y apostamos, como la capital alavesa, por que la bicicleta sea cada vez más protagonista en la movilidad urbana. Estamos convencidos de que las apuestas tienen que ir por esa línea.