El Giro recorta su etapa a 75 km por petición de los ciclistas
Los ciclistas solicitaron a la CPA un cambio de recorrido que el Giro concedió. Se suprimió el paso por el San Bernardo, cuyo descenso estaba completamente seco.
La 106ª edición del Giro de Italia empieza a estar herida de muerte. Lo que se iba a vivir como una auténtica fiesta, un espectáculo en pleno corazón de los Alpes, se recordará como una triste jornada en la historia de la Corsa Rosa. Los ciclistas se reunieron el pasado jueves con la Asociación de Ciclistas Profesionales (CPA) y salió a favor, por mayoría, la decisión de modificar el recorrido de la duodécima etapa debido a la lluvia y las bajas temperaturas que se esperaban en la ascensión al Gran San Bernardo, puerto que días antes ya sufrió una modificación cuando la organización de la carrera se vio obligada a reducirlo en 9 km por las intensas nevadas registradas en la zona desde hacía meses.
Finalmente, en unas primeras horas del día de máxima incertidumbre, la organización del Giro decidió recortar la duodécima etapa hasta dejarla únicamente en 75 de los 199 km con los que contaba inicialmente. En cuanto a puertos, sólo se ascenderán la Croix de Coeur (la salida será a pie de este puerto, sobre las 14:30 h) y final en alto en Crans Montana. El sentir general era de satisfacción, pero hubo opiniones para todos los gustos. El líder, Geraint Thomas, se mostró satisfecho en los micrófonos de Eurosport: “Hay muchos ciclistas que han enfermado y si queremos llegar a Roma con al menos 50 ciclistas, entonces es una buena decisión. Será una carrera dura, aun así, pero no rodaremos con frío durante más horas”.
La opinión de la maglia rosa contrasta con la del italiano Gianni Moscon, que era partidario de haber dejado la etapa intacta: “Ayer por la tarde se habló de que haría mal tiempo, cambios y una etapa diferente. Esta mañana han aparecido varias hipótesis y hay que agradecer a la organización que piensen en los ciclistas y que diseñaran una gran etapa. Es verdad que hace mal tiempo y que estamos cansados, pero no creo que se dieran las condiciones para recortar la etapa. Pienso que se podía correr y si alguien quería parar podía hacerlo. No nos guiamos por un médico para ser ciclistas profesionales. Si no te gusta, cambia de trabajo”. Moscon, curiosamente, ya fue uno de los corredores que, en plena nevada, tiró hacia adelante en la etapa de O Gran Camiño que el pasado febrero detuvieron los ciclistas por las bajas temperaturas. En la misma línea se mostró Ben Healy, argumentando a su vez que esta alteración reduce notablemente las opciones de los cazaetapas como él: “Solo tenemos que correr. Estas son las condiciones en el Giro, puedes esperar esto. Todos están sufriendo. Será una carrera dura y corta, que estará más hecha para los corredores de la general”.
Habrá que ver si ese momento sentó un precedente peligroso, pero lo cierto es que hoy las condiciones climatológicas no entrañaban un serio riesgo para los ciclistas. Temperaturas de unos 0º en los últimos kilómetros del San Bernardo, sí, pero una vez pasado el túnel que da paso de Italia a la vertiente suiza de Valais, la carretera se encuentra perfectamente seca bajo el soleado día que luce en Suiza. Desgraciadamente, no es la primera ocasión en la que vemos un suceso semejante, ya que en 2020, sin ir más lejos, se recortó la etapa con meta en Asti (de más de 200 pasó a 124 km) por petición de los ciclistas ante el diluvio que caía. Ojalá la batalla en Crans Montana compense un día gris para el ciclismo.
“El 90% de los ciclistas estaba a favor”
Adam Hansen, presidente de la CPA, reaccionó en sus redes sociales tras la polémica reducción de la etapa: “Para brindar claridad desde la perspectiva de los corredores, las condiciones climáticas experimentadas durante el Giro de este año han estado entre las más intensas. En respuesta, los ciclistas votaron anoche haciendo referencia al protocolo de clima extremo. De acuerdo con el reglamento, que marca la lluvia helada como el punto 1 y las temperaturas extremas como el punto 4 durante ciertas partes de la ruta de hoy, los ciclistas acordaron votar. Si la mayoría superaba el 80%, los corredores restantes seguirían y respetarían la decisión de la mayoría, que implementaría el protocolo de clima extremo y ejecutaría el punto 3: “cambio de ruta”. El proceso de votación se realizó de forma anónima, con más del 90% de los ciclistas a favor. Yo y la CPA apoyamos su decisión. Si alguien no está de acuerdo con su elección, asumiré el coste. Envíame tus críticas a mí, no a los ciclistas. Los corredores son los héroes de este deporte, y creo que deberían concentrarse únicamente en su carrera en lugar de ser objeto de comentarios negativos. Me gustaría extender mi gratitud a la organización del Giro por reconocer la necesidad de cambio y comprender la perspectiva de los ciclistas. Las condiciones climáticas extremas experimentadas este año están fuera del control de cualquiera, y los ciclistas están agradecidos por el apoyo del RCS, los voluntarios y los aficionados. ¡Harán todo lo posible para montar un espectáculo para que el mundo lo vea!”.
Varias horas más tarde, Hansen matizó que la decisión de suprimir el San Bernardo correspondió a RCS y no a los propios corredores, que eran partidarios de hacer la etapa desde el inicio y cancelar, únicamente, el paso por la Croix de Coeur debido al riesgo de helada: “Los corredores querían comenzar desde el principio, como era originalmente, y recorrer todo el recorrido y perderse Croix de Coeur, ya que ese fue el momento de lluvia combinado con las temperaturas más frías en el momento de la votación. Nos dijeron que no decidiéramos la mañana de la carrera, así que la decisión se tomó el día anterior. Si no podemos decidir por la mañana y debemos hacerlo el día anterior, debemos decidir basándonos en el clima del día anterior. Justo antes del inicio, llegó la contraoferta. La mayoría lo aceptó, pero no era su idea original. Fue idea de RCS esta ruta. Los ciclistas querían la ruta completa menos Croix de Coeur, según el clima en el momento de la votación”. El debate está sobre la mesa.