GIRO DE ITALIA

Blockhaus, Mortirolo y Marmolada decidirán el Giro

La organización presentó este miércoles las seis etapas de alta montaña de la próxima edición con las subidas al Blockhaus, Mortirolo y la Marmolada como platos fuertes.

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Giulio Ciccone, Damiano Caruso, Mikel Nieve of Spain, Jan Hirt y Joe Dombrowski suben al Passo del Mortirolo durante la decimosexta etapa del Giro de Italia 2019.
Pool Getty Images

El Giro de Italia ha desvelado este miércoles cuáles serán las grandes etapas de montaña de la edición de 2022 y que, previsiblemente, decidirán quién será el ganador de la próxima edición de la ronda italiana. La organización ha decidido apostar por varias de las cimas históricas de la carrera en las que seguro que veremos un gran espectáculo.

La primera gran jornada de montaña del Giro de Italia tendrá lugar en Sicilia sobre un recorrido monopuerto de 166 kilómetros entre Avola y la subida final al Etna con la meta en el Rifugio Sapienza, que podría hacer la primera gran criba entre los favoritos. También se presenta decisiva la segunda jornada de montaña, la primera jornada cinco estrellas del Giro, con un recorrido de 187 kilómetros con salida en Isernia y en la que los ciclistas ascenderán a Roccaraso y el Passo Lanciano antes de la subida final al exigente Blockhaus, con sus 13,6 kilómetros al 8,4% que regresa al Giro cinco años después de que ganase en su cima Nairo Quintana.

La siguiente jornada exigente de montaña tendrá lugar sobre un recorrido de 177 kilómetros entre Rivarolo Canavese y la subida final Cogne en la que los ciclistas deberán ascender en la segunda mitad de la etapa a Pila-Les Fleurs y Verrogne antes de la meta en alto en Cogne. Esta jornada tendrá lugar antes de la que se presupone que será una de las grandes etapas del Giro de Italia: la jornada de 200 kilómetros entre Salò y Aprica en la que los ciclistas deberán afrontar las subidas a Galetto di Cadino, a Santa Cristina, situada muy cerca de la meta, y, sobre todo, al Passo del Mortirolo, una de las subidas más temidas del Giro que se ascenderá por la vertiente de Edolo y que podría romper la carrera.

La penúltima jornada de montaña también tendrá un exigente recorrido sobre 165 kilómetros entre Ponte di Legno y Lavarone donde, tras un inicio favorable, los corredores afrontarán un exigente tramo final con las subidas al Passo del Vetriolo y al Monte Rovere, esta última situada a pocos kilómetros de la meta de Lavarone. Esta jornada tendrá lugar antes de la traca final del Giro, la última jornada cinco estrellas con una gran jornada de montaña de 167 kilómetros con salida en Belluno y la subida final a la Marmolada, el Passo Fedaia, que no se pudo subir el año pasado a causa de las condiciones climatológicas. Antes de la Marmolada, los ciclistas deberán afrontar la subida a otros dos colosos del Giro: el Passo San Pellegrino y el Passo Pordoi, que será Cima Coppi de esta edición con sus 2.239 metros de altitud.

Con la revelación de las etapas de montaña, al Giro ya sólo le queda revelar la última gran incógnita del recorrido de la edición de 2022: la ciudad que acogerá la última etapa de la carrera (todo apunta a que será una contrarreloj) y el podio final de la prueba. Una pregunta a la que la organización dará respuesta este jueves para terminar de completar el puzle del recorrido del Giro.