CICLISMO | MTB
Van der Poel sufre en su vuelta al MTB: Tokio, en el horizonte
El neerlandés, en su retorno a la Copa del Mundo de MTB, terminó en la séptima plaza. Su objetivo en los Juegos de Tokio es el oro. Pidcock fue quinto.
El neerlandés Mathieu van der Poel se quedó lejos del podio en su retorno a la Copa del Mundo de bicicleta de montaña, tras concluir este domingo séptimo en la prueba disputada en la localidad alemana de Albstadt y en la que se impuso el francés Victor Koretzky. Tras brillar este curso sobre el barro, al coronarse por cuarta vez campeón del mundo de ciclocrós, y en la carretera, con su triunfo en la Strade Bianche, el polifacético Van der Poel se reencontró con la bicicleta de montaña, la especialidad en la que aspira a colgarse el oro en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio.
Un objetivo para el que el neerlandés deberá seguir trabajando duramente tras lo visto este domingo en Albstadt, prueba inaugural de la Copa del Mundo. Y eso que el fin de semana no pudo empezar mejor para Mathieu Van der Poel, que el pasado viernes se impuso en la prueba corta, que conforma la parrilla de salida. Un triunfo que pareció envalentonar al corredor del Alpecin Fenix que salió dispuesto a dinamitar la prueba desde el principio con un furibundo ataque en la primera vuelta.
Pero las fuerzas no acompañaron a Van der Poel que, a diferencia de la mayoría de sus rivales, apenas ha trabajado un mes sobre la bicicleta de montaña, tras centrarse en las pruebas de carretera. Una circunstancia que impidió al neerlandés seguir el ritmo de los favoritos mediada la tercera vuelta del recorrido, para acabar finalmente a 1:13 minutos del vencedor.
Todo lo contrario que el joven británico Thomas Pidcock, otro ciclista como Van der Poel capaz de brillar tanto en el ciclocrós, como la carretera o la bicicleta de montaña. Pidcock que arrancó la prueba desde la undécima línea de parrilla, tras no participar en la prueba corta del viernes, apenas necesitó tres vueltas para situarse entre los mejores.
Sin embargo, el británico, que este curso se impuso en carretera en la Flecha Brabanzona y fue segundo en la Amstel Gold Race, se quedó fuera de la lucha por el podio, tras concluir quinto a 29 segundos del ganador. Quien si peleó hasta el final por el triunfo fue el suizo Nino Schurter, el gran dominador de la especialidad, que tuvo que conformarse finalmente con la segunda plaza, tras ceder ante el francés Victor Koretzky en el esprint final.
Una derrota de la que Schurter, ganador de siete ediciones de la Copa del Mundo y vigente campeón olímpico, tratará de resarcirse la próxima semana en la localidad checa de Nove Mesto, una prueba en la que volverán a figurar en la salida tanto Thomas Pidcock como Mathieu Van der Poel.