El Movimiento Por un Ciclismo Creíble no está contento con la política de invitaciones del Giro de Italia. Este fue uno de los puntos abordados en la última reunión de su junta directiva, por vía telemática. Participaron en ella el presidente Roger Legeay; el vicepresidente Iwan Spekenbrink, del DSM; el tesorero Sébastien Hinault (Arkéa), el tesorero asistente Marc Sergeant (Lotto), el secretario Philippe Senmartin (Total), el secretario asistente, Franck Trajber (Cofidis), el hematólogo Pierre Lebreton y los vocales Christophe Brandt (Bingoal), Gianni Savio (Androni) y Vincent Lavenu (AG2R).

"Nos sorprende que no se haya tenido en cuenta el criterio ético. RCS concedió dos de sus cuatro invitaciones a equipos que no son miembros del MPCC, como el Eolo-Kometa y Vini Zabù. El caso de Vini Zabù es especialmente molesto porque este equipo, que en su día fue miembro del MPCC, decidió abandonarlo y tuvo un positivo en un control antidopaje en el Giro de Italia de 2020. Consideramos que este lamentable suceso debería haber influido en la decisión del organizador. Dado que no ha sido así, nos cuesta entender cómo RCS Sport establece sus criterios, tanto en términos deportivos como éticos", aseguró el movimiento tras el encuentro. 

"En 2020, RCS Sport no siguió el ejemplo de otros organizadores principales como ASO o Flanders Classics, concediendo menos invitaciones a los equipos del MPCC, una situación que ya se había experimentado. No podemos confiar en que 2021 nos prometa un cambio de tendencia", añadieron. Afirman que su intención no es "presionar" a los organizadores en este tema, pero creen que se está mandando "una señal equivocada".