Marc Soler, que este año ya se exhibió acabando tercero la Volta a Catalunya, sigue dando muestras de que es una de las grandes promesas del ciclismo español. En la llegada de la montaña a la Vuelta a Suiza, otra carrera World Tour, el joven ciclista de 23 años del Movistar aguantó en la última subida a Villars-Sur-Oillon con el grupo de favoritos, donde marchaban Pozzovivo y Frank (Ag2r), Kruijswijk (Lotto Jumbo), Spilak (Katusha) y un Damiano Caruso (BMC) que se ha colocado como nuevo líder de la carrera. Soler respondió a los ataques que seleccionaron el grupo y sólo perdió contacto en la última rampa, aunque le valió para colocarse quinto en la general a 31" del italiano. 

Esa fue la lucha por la general, ya que la victoria en esta cuarta etapa se la llevó el norteamericano Lawrence Warbasse, del nuevo equipo irlandés Acqua Blue. Perteneciente a una escapada de cinco corredores que saltaron en el km 14 (de una etapa de 143), el ciclista de Michigan de 26 años fue el más fuerte y llegó a pie de puerto con más de 3:00 sobre el pelotón. Supo regular su ventaja para apuntarse una victoria World Tour para estrenar su palmarés a lo grande.

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Peor le fue a otros nombres importantes como Tom Dumoulin (Sunweb), reciente ganador del Giro, que se desentendió y llegó a 7:12. Tampoco le fue bien a Ion Izagirre (Bahrain), segundo el año pasado en esta carrera, que cruzó la meta a 4:29. El ganador del año pasado, el colombiano Miguel Ángel López (Astana), que llega de 8 meses de lesión, fue de menos a más y llegó octavo, cerca de los favoritos.