Contador regresa a la carrera en la que despegó en 2007

Alberto Contador no disputa la París-Niza desde 2010, año de su segundo título. El madrileño se estrenó en 2007, meses antes de conquistar su primer Tour: “Se trata de una carrera especial. Me hace ilusión volver a la prueba que me destapó como ciclista, y que de alguna forma supuso el trampolín para el Tour de Francia”.

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El jefe del Tin­koff afrontará desde hoy su segundo test de 2016, tras vencer en el Alto de Malhao y acabar tercero en el Algarve: “Me he entrenado bien, he recuperado y le he dado más ritmo a las piernas. Saldremos con motivación y con la intención de luchar por la victoria. Sabemos de su exigencia, pero París-Niza es una ronda del máximo nivel que a todo el mundo le encantaría ganar”.

Contador también habló del recorrido: “Lo considero uno de los más duros que recuerdo, muy montañoso, aunque por otro lado empieza con un prólogo llano y nada técnico, muy apto para los especialistas. Echo de menos esa contrarreloj en el Col d’Eze, pero a cambio tendremos dos finales en alto, uno más para gente de peso (Mont Brouilly) y otro para escaladores (La Madone d’Utelle, de primera)”.

Luis León Sánchez, vencedor en 2009, e Ion Izagirre, con galones en el Movistar para las carreras de una semana, se presentan también como aspirantes al triunfo por su buen momento. Luis León terminó segundo en la Comunitat Valenciana, se impuso en Foia en el Algarve y se cayó en la crono en la que defendía su liderato. Izagirre concluyó cuarto en Valencia (por otra caída) y segundo en el Algarve, así que avisa: “Me gustaría ir a por todas”.

Richie Porte, ganador en 2013 y 2015, partirá con el dorsal número uno. La nómina de candidatos la completan ciclistas de categoría: Thomas, Spilak, Rui Costa, Gallopin, Bardet, Dumoulin, Rolland, Kelderman, Chavanel o Coppel. Es lo que tiene el World Tour: normalmente se miden los mejores desde enero hasta octubre.