Valverde vence en un repecho a su propio compañero Rojas

Alejandro Valverde dio un golpe de autoridad tras vencer en un sprint perfectamente planificado por José Joaquín Rojas, que fue segundo y que le lanzó hacia la meta de Olot (Girona) después de cinco horas de una etapa infernal de lluvia y viento racheado, de 191,8 km, que partió de Mataró (Barcelona): "Resultó similar a la Milán-San Remo, donde también nos llovió”.

Lo cierto es que cuatro hombres fueron los protagonistas de la jornada: el mallorquín Lluis Mas (Caja Rural), el neozelandés Sam Bewley (Orica-GreenEdge), el holandés Tom Stamsnijder (Giant) y el etíope Tsgbu Grmay (Lampre-Merida), que se escaparon del pelotón en el km 20. Con el equipo polaco CCC-Polkowice del líder Maciej Paterski controlando que nadie más saltara del grupo e intentando acelerar el ritmo de la carrera, la ventaja de los escapados llegó a ser de 4:30.

A partir de ese momento, los hombres del Sky, con Froome al frente, y el Quick Step del colombiano Rigoberto Urán, relevaban al CCC polaco en la cabeza de la carrera, con el Movistar de Valverde y los favoritos cogiendo posiciones para el posible sprint final. Los hombres del Movistar arroparon bien a su jefe de filas y Rojas le lanzó: “Esto va dedicado para Tondo, las víctimas del avión de Barcelona y sus familiares”. El murciano, ganador de la Volta en 2009, lograba su victoria número 90 como profesional. Sin embargo, no se celebró la ceremonia del podio como muestra de respeto.

Las cosas siguen como estaban ayer y Paterski, Rolland, a cuatro segundos y De Clercq, a ocho, lideran la general. Este miércoles se disputará la tercera etapa con salida y llegada en Girona de 158,6 km de recorrido y con dos pasos por el temible Alt dels Angels, de primera categoría, a 19 km de la llegada. Parece una etapa ideal para los velocistas, pero ese obstáculo podría comportar alguna sorpresa.