El Euskadi se despide en casa con una victoria de Barbero

El Euskadi está a punto de echar el telón a dos décadas de existencia y en el Circuito de Getxo vivió uno de los momentos más emotivos y amargos. El equipo —heredero del profesional naranja que fue un ejemplo a nivel mundial, ahora en categoría continental y en el futuro, aficionado para trabajar solo con chavales— ganó, bajo la denominación de Fundación Euskadi, el Circuito de Getxo y ya sólo tiene en mente la Vuelta a Burgos, a mediados de agosto, cuando dirá el adiós definitivo. "En España queda el Movistar, Caja Rural y Burgos (continentales) y a ver qué pasa con el de Fernando Alonso; el ciclismo agoniza", se entristecía Gerrikagoitia, el último director de la formación vasca. El Movistar, tal vez por respeto a un momento tan solemne, apenas dio batalla en el tramo definitivo.

El burgalés Carlos Barbero se impuso al sprint en Getxo. Se cierra el círculo, ya que el extinto Euskaltel Euskadi logró su último triunfo precisamente en la misma carrera, con Juanjo Lobato el pasado año. Se completaron diez vueltas y 170 kilómetros por el circuito. El picante inicial lo puso un cuarteto de fugados con Molina y Zuazubiskar bregando por el repecho de la meta en Arkotxa para jugarse el premio de la montaña. El valenciano del Caja Rural salió ganador de la pugna.

Movistar se dedicó a controlar y en cuanto echó abajo la escapada, era mayoría en cada corte que se formaba. El último con Castroviejo, Herrada y Dayer Quintana (el hermano menor de Nairo) también llevaba dos Caja Rural como Txurruka y Mas. Rojas y Visconti afilaban sus garras bajo el sofocante calor. La punta de velocidad de Barbero y su capacidad en los tramos más duros de la llegada fueron suficientes para soltar de rueda a todos sus rivales. El italiano Chirico fue el único que entró tras su rueda.

Barbero suma en Getxo un nuevo éxito a una gran temporada, ya que se hizo con el triunfo en la general del Alentejo y logró el podio en La Rioja y el bronce en el Campeonato de España, en Ponferrada. "Es muy triste todo esto, y un honor haber dado al equipo un triunfo con tanta emotividad. Es la mejor despedida posible", concluyó en meta el burgalés.