André Greipel se apuntó al sprint la primera jornada del Tour de Omán, que también lidera. Su equipo, el Lotto, controló, echó abajo la fuga del día, le reintegró en el grupo delantero tras un corte provocado por el viento y le llevó en palmitas hasta los metros finales: “Mis chicos son realmente increíbles. Gracias a ellos, me resulta mucho más fácil hacer bien mi trabajo”.

Con su triunfo, el alemán se convierte en el pichichi de 2014, con cuatro, y empata a tres victorias con Sagan y Kittel como los que tienen mejor palmarés en Omán. Omega preparó la llegada a Tom Boonen, que resumió sus sensaciones con claridad: “La jodí al final después del sacrificio de mis compañeros. Mi consuelo es que quedan más oportunidades”.

Purito Rodríguez y Dani Moreno, el dúo español del Katusha, pasó un día sin inconvenientes: “De no ser por los acelerones de la última parte, habríamos vivido una etapa muy tranquila. Se marchó una escapada, la vigilaron las escuadras de los velocistas, hizo buen tiempo y apenas nos dio el aire. Ya llegarán momentos más complicados”.

Chris Froome, defensor del título, se expresó igual: “Para tratarse de la primera toma de contacto de la temporada ha ido bien, sin problemas ni sobresaltos”. Pinot no tomó la salida por culpa de la fiebre. Este miércoles, la segunda jornada parece predestinada también a una volata y sosiego para los gallos.